Stalin murió sin herederos

¿Cuántas veces no han escuchado que nosotros, los católicos, somos miembros de una institución que hizo las cruzadas y lanzó la inquisición? Esto se ve en la tele y lo repiten sin dudarlo la señora Juana en la peluquería y el señor Manolo en el bar. Es nuestra historia, y nos la rebozan por los morros a nada que te descuides.

No reniego para nada de la historia de la iglesia para lo bueno y para lo malo. De sus veinte siglos de existencia. De sus santos y pecadores. La iglesia es mi madre y como hijo asumo defectos y virtudes. Eso sí, si en veinte siglos de existencia los únicos reproches son las cruzadas y la inquisición, no vamos mal.

No es el momento de enumerar las cosas buenas ni de sacar pecho por tantas aportaciones a la historia de la humanidad. Tampoco el de los golpes de pecho por los errores, de los que ampliamente y en variadas ocasiones se ha pedido perdón.

Lo que me sorprende es que sea la Iglesia la única institución con herederos. En mi post de ayer me resultó curioso un comentarista que decía, refiriéndose a Sánchez Gordillo, “cierto que los regímenes comunistas que el mundo ha conocido han causado muchos males, muchas muertes injustas, etc. Sin embargo, me parece jugar sucio relacionar a Sánchez Gordillo con esos regímenes totalitarios, con la intención de deslegitimar su trayectoria.”

¿Lo ven? Si alguien saca supuestos trapos sucios de la Iglesia, es para que veamos lo que es en realidad y cómo falsea el evangelio, pero si se sacan de la izquierda es jugar sucio para deslegitimar la trayectoria de alguien. Pues no cuela. Ya lo creo que no.

La teoría siempre es bonita. Nada más utópico y llamativo que la internacional: “arriba parias de la tierra, es el fin de la opresión, la igualdad ley ha de ser”. Parece normal que uno quiera saber eso qué frutos ha dado allí donde se ha llevado a cabo el proyecto. Pues según reconoce el mismo comentarista: “los regímenes comunistas que el mundo ha conocido han causado muchos males, muchas muertes injustas”. No lo digo yo, lo dice el comentarista.

¿Cuántos muertos dejó Stalin para conseguir el paraíso comunista? Se estima que entre ejecutados directamente y víctimas de las hambrunas toleradas si no provocadas, en torno a los diez millones. ¿Qué libertad existe hoy en Cuba, en Corea del Norte? ¿Cuál es la situación económica y moral de la antigua Unión Soviética? Calamitosa. Lo sabemos. Pero decir que IU, el comunismo, ha dejado estos frutos, es deslegitimar a Gordillo.

Por eso el título del post: ¿Stalin no tiene herederos? ¿Nadie lo va a reivindicar? Curioso. Mientras a la iglesia se nos acusa de las cruzadas, la inquisición y lo que sea, recordar la historia de la izquierda en el siglo XX es de mal gusto. Evidente. De pésimo gusto. No hay por dónde cogerla.

Un par de cosas para terminar:

Ya que hablamos de historia y de frutos… ¿Dónde se respetan más los derechos humanos? Pues sobre todo en países de tradición cristiana: Europa, Norteamérica, Australia. Mucho menos en países de tradición budista o hinduista, menos en países musulmanes. Y en la cola los países comunistas: por ejemplo Corea del Norte o Cuba.

Y otra cosa. Creeré en las bondades de los sistemas comunistas cuando vea salir a los balseros desde Miami camino de la libertad y la justicia de Cuba.

Estoy feliz con los frutos de mi Iglesia: frutos de fe, de cultura, de derechos humanos, de solidaridad. Y pido perdón por los errores. Y cada cual que cargue con los suyos, que aquí historia tenemos todos.