Maduras para abortar
Los comentaristas son la gran riqueza de un blog. El otro día, hablando de Iesu Communio, gente hubo que hablaba de falta de madurez, “comedura de coco”, manipulación de conciencias… en fin, todas esas lindeces que uno tiene escuchadas mil veces.
Otro comentarista afirmó: si fuera para abortar, las hubieran considerado maduras.
Es la paradoja de nuestro mundo. Creemos en la mayoría de edad a los dieciocho años y hartitos estamos de que nos hablen de respeto, responsabilidad, dejar actuar a la gente en conciencia aunque se les ocurra la mayor de las barbaridades. La niña puede decidir irse a una comuna hippie (en caso de que quede alguna), enamorarse de niño o niña, trabajar o no, irse a vivir con el novio, embarazarse, abortar, ser vegetariana biónica, o hacerse cabaretera, lo que sea. Para eso el mayor de edad y se supone que madura.
Lo del aborto merece la pena que se piense más. Nos han vendido por activa y pasiva que la mujer desde sus quince o dieciséis años es libre, sabe lo que se hace, madura, sensata, responsable y digna de todo respeto tome las decisiones que tome. Madura y sensata para arrancar una vida de sus entrañas, que supone en verdad dos muertes: la del niño y la de la madre, que nunca acaba de vencer el sentimiento de culpa de haber matado a su propio hijo. Aquí por lo visto no hay comedura de coco ni manipulación en la fragilidad.
Tenemos en la parroquia un programa de apoyo a chicas embarazadas, rescatadas de la misma puerta de la clínica abortista. Una chiquilla, hoy a punto de dar a luz, con apenas dieciséis años, al enterarse de su embarazo fue a hablar con la orientadora de su instituto, que evidentemente le estuvo animando ¡y no saben con qué fuerza! a abortar porque claro, iba a destrozar su vida. Habló con la trabajadora social de su zona que insistió en lo mismo. Casi forzando el aborto. Pero esto por lo visto es libertad, es respeto, y para nada manipulación de conciencia y comedura de coco.
Pues ya ven. Te vas a Iesu Communio, lo encuentras lleno de chicas jóvenes, muchas de ellas que han entrado con sus veintitantos si no treinta y tantos, jóvenes que no niñas, que están ahí libremente, respondiendo a una llamada de Dios para amar, para ser de Dios y de la Iglesia, para orar y vivir en común. Pues ya ven, que si falta de madurez, que si manipulación psicológica. Si hubieran ido a abortar serían maduras y sensatas. Paradojas de nuestro mundo que aplaude el pecado y se escandaliza de la virtud y la entrega.
Mundo extraño que no comprende la entrega. Mundo imposible que tolera y fomenta la muerte y el pecado.
15 comentarios
En las noticias, en las realidades de la vida y en esta sociedad precursora de la muerte mi mujer y yo nos miramos y coemntamos, "sigue suelto y por sus respetos". Sencillamente el diablo.
Salut
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De ninguna manera voy a negar la veracidad de esta historia. Si usted lo cuenta así, así le habrá llegado, supongo.
No obstante, me extraña mucho, mucho.
¿Por qué? Pues porque los docente estamos tan tan tan escarmentados por las amenazas, denuncias absurdas, calñumnias, etc, que nos guardamos muchísimo de intervenir ni involucrarnos en cuestiones que impliquen temas de este estilo: la orientadora no es una docente más, es cierto, pero fuera de la orientación académica y profesional, dudo mucho que se implicara para "presionar".
Además es que no hace falta ninguna eso de presionar. Las niñas en edad de instituto, si que quedan embarazadas, antes de llegar a la orientadora de su instituto han pasado ya por la presión ambiental, la del novio, la de las amigas, todos ellos empujarán ala aborto, seguramente sin demasiada presión, como dándolo por supuesto. Y lo más triste es que sus propios padres serán quienes la induzcan al aborto, la acompañen encantados, lo paguen y se olviden.
Tengamos en cuentas que la mamá de la niña pertenece a la generación que ya abortó cuanto quiso, que votó al aborto y que quizá, ella misma haya abortado.
Hace muchos años podía haber presiones, las había, yo sufrí en mis embarazos, aun sin tener aún en uno de ellos la edad protocolaria para la amniocentesis, una presión insoportable para hacerse "la prueba", ya se sabe con qué fin.
Ahora casi no es necesario presionar. Se da por supuesto y ya está.
Y en cuanto a la orientadora, si es lista, haría lo que hace la mayoría, mirar para otro lado y decir que lo resuelva con sus padres, en vez de exponerse a las múltiples amenazas que recibimos de papás y mamás empeñados en que hemos invadido esferas privadas de sus hijos, a veces simplemente por preguntar dónde han pasado las vacaciones.
Pero concedo que este haya sido un caso excepcional; como lo es el hecho de que la niña, final y felizmente haya proseguido con su embarazo.
Pienso que el significado de algunas palabras, ante los últimos avances de la ciencia por el que podemos ver al niño dentro del vientre de su madre, y que prematuros puedan vivir fuera del vientre materno, a dejado la palabra "nacer" sin el significado adecuado. ¿Cuándo nace un ser humano?. El hecho de estar dentro o fuera del vientre no puede condicionarlo.
Un ser humano nace en el mismo momento de la concepción.
Estamos ya en contacto.
Excelente articulo.
Dios le Bendiga
Jesus
Sobre la postura de algunos padres para que sus hijos accedan a la vida religiosa puede comprobar la historia de un pueblo de Córdoba que se manifestó, que los padres se pusieron en huelga de hambre porque dos jovenes, de 18 años entraron en las hermanas de la cruz. Los argimentos de los padres eran que sus hijas habían sido coaccionadas, que les habían comido el coco... Pero si las mismas hubieran decidido abortar con 16 años, habrían realizado manifestaciones, huelga de hambre, convocatoria de medios? Desgraciadamente creo que no, que habría considerado que eran maduras. Contradicciones del ser humano.
Ella deseando hacer la voluntad de Diós, sus padres contentísimos con la decisión de su hija.
Y el Señor, a pesar nuestro, sigue amándonos.
La verdadera presión ya prácticamente no existe porque no es necesaria. Tantos años de ley de aborto ha conseguido una sociedad en la que mucha gente, demasiada, ha participado con más o menos responsabilidad en algún aborto. Eso adormece la conciencia y ya casi nadie se plante aotra cosa que bno sea abortar ante un embarazo inconveniente.
La presión, hace 20 años, la ejercían sobre todo médicos y enfermeras. La primeras semanas de embarazo te perseguíam para que te hiceras sí o sí una amniocentesis aun antes de la edad de protocolo.
Pero ahora nada, la presión es difusa y ambiental. No hace ninguna falta ejercer presión.
Y si un novio dice: me responsabilizo del bebé y me caso contigo, la chica huye, no sin antes decirle "¿Tú estás tonto? ¿casarme yo? Me quito al niño, lo primero, y luego tú piérdete por ahí, ¿de qué siglo sales con esas ideas de que porque me haya quedado embarazada con 16 años haya que casarse? Tas loco o qué?" Y los padres lo aporyarían todo.
A Pedro de Madrid, mejor que no se lo digan, porque es algo muy traumatico y puede causar desordenes psicologicos importantes.
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