La provocación de la archidiócesis de Barcelona
La archidiócesis de Barcelona quiere organizar una Jornada de homenaje a monseñor Joan Carrera, obispo auxiliar fallecido el tres de octubre del año pasado. Y a mí me parece muy bien. Aunque se han dicho muchas cosas no especialmente positivas del obispo Joan, por ejemplo su carácter excesivamente nacionalista y su escoramiento hacia las posturas “progresistas” de parte del clero catalán, no es menos cierto que tenía un carácter pastoral infinitamente más cercano que el del n.s.b.a cardenal arzobispo Lluis Martínez Sistach. Por si había alguna duda, Germinans ha revelado esta misma semana que monseñor Carrera intentó, con corazón pastoral, hacer de mediador entre el cardenal y los “chicos del germi". Algún día explicarán, y explicaré, todo lo ocurrido en el último año y medio y que, siquiera indirectamente, ha provocado que hoy InfoCatólica sea lo que es. A veces el Señor escribe con renglones torcidos, pero se le entiende muy bien.
El caso es que al cardenal, o a la persona encargada del tema, no se le ha ocurrido mejor idea que elegir el 17 de octubre para celebrar esa jornada. No el 3, cuando se cumple el año de su muerte. No el 10, una semana después. No, será el 17. Pero claro, ¿qué es lo que tiene esa fecha de especial? Pues que en Madrid está convocada una manifestación contra la futura ley del aborto (¿por qué no también contra la actual), a la que se supone que asistirán miles y miles de personas de todo el estado español. Y como quiera que en este país la inmensa mayoría de los que somos pro-vida somos también cristianos, era de esperar que desde Barcelona vinieran unos cuantos. No sé si cientos o miles, pero seguro que muchos. Pues bien, ahora van a tener que elegir entre ir a Madrid o hacer caso de lo que se les pide desde su archidiócesis. Porque la convocatoria no deja lugar a dudas sobre quién debe de asistir a la Jornada para el obispo Carrera:
A los presbíteros, diáconos, religiosos, religiosas, laicos y laicas, miembros del Consejo Pastoral Diocesano y de los consejos parroquiales y arciprestales, escuelas cristianas, maestras y profesores de religión y dirigentes de movimientos, asociaciones y otras entidades diocesanas
Y digo yo, ¿por qué se han quedado ahí? Podrían haber seguido tomando el patrón de un anuncio de Coca-Cola: