Regreso de Roma
Como bien saben los lectores de este blog, el lunes y el martes de esta semana los he pasado en una ciudad europea de cierta solera histórica, que está a la orillas de un río llamado Tiber. O sea, que he estado en Roma. Acudí para asistir al meeting de blogueros organizado por el Pontificio Consejo de Cultura y el de Comunicaciones. La idea era muy buena y creo que todos los allá presentes llegamos a la conclusión de que había merecido la pena asistir. Un acto así sirve, entre otras cosas, para que nos “veamos las caras” muchos que hasta entonces sólo habíamos tenido una relación a través de internet. Sólo por eso merece la pena. Pero además, es evidente que la Iglesia se ha dado cuenta del potencial de la red y más concretamente del mundo de la blogosfera. Esta primera toma de contacto era necesaria y puede ser un buen punto de partido para futuros encuentros.
Para mí fue un auténtico placer el poder conocer personalmente a Jorge Enrique Mújica, con quien llevo intercambiando emails desde hace ya unos cuantos años, a Mayra Novelo, directora de Catholic.net, a Andrés Beltramo, periodista que se mueve por los ambientes informativos vaticanos como pez en el agua, a J. Francisco Jiménez, periodista de Forum Libertas con el que es facilísimo congeniar, al P. Antonio Diufain… a etc, etc. El problema de dar nombres es que siempre te dejas alguno. Una de las cosas más peculiares es estar en una reunión de este tipo y que te salude gente que no conoces.
Vaya por delante que el trato que nos dieron los organizadores fue cordialísimo. Concretamente, el P. Melchor Sánchez de Toca, subsecretario del Pontifico Consejo de la Cultura se portó la mar de bien conmigo, cosa que le agradeceré siempre, pues es la primera vez que yo acudía a una “movida” de este estilo.