Pero qué gente más mala son esos legionarios disidentes
Cuando el Papa nombró a S.E.R Velasio de Paolis como Delegado Pontificio para la Legión de Cristo, muchos legionarios y miembros de Regnum Christi que estaban en estado de shock por las revelaciones sobre la vida inmoral de su fundador, se mostraron esperanzados de que se pudiera salvar lo salvable de su congregación. Benedicto XVI había optado por la renovación desde dentro, en vez de por una refundación o desaparición de la Legión. Y así debía de ser.
Desde entonces a esta parte, creo que entre los legionarios se han manifestado con más o menos claridad diversas tendencias. Hay un sector importante al que podríamos llamar macielista. Es decir, todavía no se creen las acusaciones contra Maciel, al que siguen considerando como verdadero padre espiritual. Luego están aquellos que se mantienen en el oficialismo. Es decir, se dejan llevar, confían en que De Paolis haga las cosas bien e intentan vivir su fe lo mejor que pueden. Y por último, hay un grupo que no está para nada de acuerdo con lo que está ocurriendo en los últimos meses y que ha optado o por salir de la Legión o por quedarse dentro intentando ser semilla de renovación. Estos últimos no entienden cómo es posible que la dirección que arropó y/o encubrió a Maciel siga al frente de la Legión.
Pues bien, el cardenal De Paolis ha decidido que en la Legión no sobra el sector macielista sino el de los críticos. Y contra ellos ha dirigido un discurso que parece más propio de un líder de la WatchTower que de un cardenal de la Iglesia Católica.