La única solución posible a la crisis de la Iglesia
Es la primera vez que cuento esto de forma pública, pero lo creo necesario.
Ávila, España, principios de siglo XXI. II Congreso Camino a Roma -testimonios de protestantes convertidos al catolicismo- celebrado por Miles Iesu en este país. Con la presencia de dos cardenales curiales: los colombianos Castrillón Hoyos y López Trujillo, ambos ya fallecidos. En el programa figuraba una intervención del cardenal Castrillón. Dio una charla de “aliño", en la que como cabía esperar habló de la situación con la FSSPX, y al finalizar, mientras iba camino de la salida, levantó la voz para que todos los presentes le pudieran oír. Seguramente no soy capaz de repetir sus palabras exactas, pero me acuerdo perfectamente del sentido de las mismas:
“Queridos fieles, en cuanto a los escándalos que salen en los medios de comunicación de sacerdotes que han cometido inmoralidades, recordad: una vez sacerdote, sacerdote para siempre. Debemos proteger a nuestros sacerdotes, nunca denunciarles".
Algunos de los presentes, ciertamente no todos y no la mayoría, aplaudieron. Yo, que debía dar mi testimonio poco después y que había regresado a la Iglesia apenas año y medio antes, me quedé pensando si lo mejor no era salir corriendo de allí. Era todo un cardenal defendiendo públicamente a sacerdotes abusadores sin hacer la menor mención a sus víctimas.
Las palabras del purpurado colombiano reflejaban bien a las claras lo que buena parte de la jerarquía católica de finales del siglo XX pensaba acerca de los abusos sexuales cometidos contra niños y adolescentes. Es más, seguramente también reflejaba lo que muchos cardenales y obispos pensaban que había que hacer con sacerdotes cuya inmoralidad sexual era patente, aunque no estuvieran menores de edad involucrados. Lo importante era proteger a esos curas indignos.
Casi 20 años después hemos asistido a un evento en el Vaticano titulado "La Protección de los menores en la Iglesia", con la participación de los presidentes de las conferencia episcopales de todo el mundo. Pues bien, comparen estas palabras de Juan Pablo II a cardenales de EE.UU en el año 2002:
Como a vosotros, también a mí me ha dolido profundamente que algunos sacerdotes y religiosos, cuya vocación es ayudar a las personas a vivir una vida santa a los ojos de Dios, hayan causado tanto sufrimiento y escándalo a los jóvenes. Debido a ese gran daño provocado por algunos sacerdotes y religiosos, a la Iglesia misma se la ve con sospecha, y muchos se sienten ofendidos por el modo como perciben que han actuado los responsables de la Iglesia a este respecto. Desde todos los puntos de vista, el abuso que ha causado esta crisis es inmoral y, con razón, la sociedad lo considera un crimen; es también un pecado horrible a los ojos de Dios. A las víctimas y a sus familias, dondequiera que se encuentren, les expreso mi profundo sentimiento de solidaridad y mi preocupación.
Y estas de Benedicto XVI en su carta pastoral a los católicos de Irlanda, de marzo del 2010
…estoy profundamente consternado por las noticias que han salido a la luz sobre el abuso de niños y jóvenes vulnerables por parte de miembros de la Iglesia en Irlanda, especialmente sacerdotes y religiosos. Comparto la desazón y el sentimiento de traición que muchos de vosotros habéis experimentado al enteraros de esos actos pecaminosos y criminales y del modo en que los afrontaron las autoridades de la Iglesia en Irlanda.
Con las del papa Francisco en su discurso final de ayer:
… si en la Iglesia se descubre incluso un solo caso de abuso —que representa ya en sí mismo una monstruosidad—, ese caso será afrontado con la mayor seriedad. De hecho, en la justificada rabia de la gente, la Iglesia ve el reflejo de Dios, traicionado y abofeteado por estos consagrados deshonestos.
Hay más “coincidencias". Tanto Juan Pablo II, como Benedicto XVI y ahora Francisco, señalaron que la cuestión de los abusos a menores es un problema de toda la sociedad, no solo de la Iglesia:
Juan Pablo II a los cardenales de EE.UU:
Los abusos de menores son un síntoma grave de una crisis que no sólo afecta a la Iglesia, sino también a la sociedad entera. Se trata de una crisis profundamente arraigada de moralidad sexual, incluso de relaciones humanas, y sus principales víctimas son la familia y los jóvenes. La Iglesia, tratando el problema de esos abusos con claridad y determinación, ayudará a la sociedad a comprender y afrontar la crisis en su seno.
Benedicto XVI a los católicos irlandeses:
En realidad, como han indicado muchas personas en vuestro país, el problema de abuso de menores no es específico de Irlanda ni de la Iglesia.
Francisco, ayer:
Estamos, por tanto, ante un problema universal y transversal que desgraciadamente se verifica en casi todas partes.
Tres Papas, misma situación, mismos argumentos. Es lógico que mucha gente, tanto dentro como fuera de la Iglesia, se canse de escuchar lo mismo. Es lógico que muchos piensen que basta ya de lamentos y de condenas grandilocuentes de los abusos. Sí, ya sabemos que el hecho de que un sacerdote abuse de un niño o se acueste con un adolescente es gravísimo. No hace falta que nos lo recuerden. Y también sabemos que actúa muy gravemente el obispo o superor de orden religiosa que conoce algo así y en vez de solucionar el asunto se dedica a taparlo. Ello añade escándalo y dolor. No hace falta que nos lo recuerden.
Estos días hemos visto desfilar por Roma a víctimas contando sus desgarradores testimonios, a obispos y cardenales diciendo “¡hay que ver qué mal lo hemos hecho!” y a expertos repitiendo las mismas tesis de siempre sobre lo que hay que hacer para que no se vuelvan a repetir los errores del pasado. Pues vale, muy bien, ¿y?…. nihil novum sub sole.
En realidad, no creo que haya que recurrir a grandes eventos, a pomposos congresos, a reuniones de altísimo nivel para afrontar esta cuestión. Basta con que aquellos que pastorean la Iglesia tengan temor de Dios y se tomen en serio las palabras de Cristo y los apóstoles. Por ejemplo, estas de nuestro Señor a sus discípulos:
«Es imposible que no haya escándalos; pero ¡ay de quien los provoca! Al que escandaliza a uno de estos pequeños, más le valdría que le ataran al cuello una piedra de molino y lo arrojasen al mar.
Luc 17,1-2
Y estas de San Pablo a los corintios:
En la carta que os escribí os decía que no os juntarais con los inmorales. No me refería a los inmorales de este mundo, ni tampoco a los codiciosos, a los estafadores o idólatras; para eso tendríais que salir de este mundo. Lo que de hecho os dije es que no os juntarais con uno que se llama hermano y es inmoral, codicioso, idólatra, difamador, borracho o estafador: con quien sea así, ni compartir la mesa.
¿Acaso me toca a mí juzgar a los de fuera? ¿No es a los de dentro a quienes juzgáis vosotros? A los de fuera los juzgará Dios. Expulsad al malvado de entre vosotros.
1 Cor 5,9-13
El apóstol se refería a un caso de adulterio público de un fiel de Corinto. ¿Qué no habría dicho de un abusador de menores o de un presbítero que se acostara con jóvenes?
Sobran golpes de pecho, lamentos plañideros y peticiones mediáticas de perdón y falta tomarse en serio la ley divina, la moral católica y el llamado a una auténtica conversión mediante el arrepentimiento y la penitencia reales. Sabemos que el pecado siempre estará presente, pero como dice el apóstol San Pablo, donde abunda el pecado sobreabunda la gracia (Rom 5,20). Pero claro, habla de una gracia salvífica, que transforma al pecador en santo. No de esa falsa gracia, de esa falsa misericordia que deja al perverso en su perversión, al pecador en sus pecados, cual esclavo incapaz de hacer uso de la libertad que le ha sido regalada.
No serán los psicólogos ni las medidas recomendadas por la ONU quienes salven a la Iglesia de escándalos futuros. Es necesaria una reforma radical de la Iglesia para afrontar la apostasía reinante, de la que la cuestión de los abusos a menores es una de sus peores consecuencias. Una reforma que plante la semilla de la santidad, de la sana doctrina, del regreso a la Tradición.
Luis Fernando Pérez Bustamante
52 comentarios
Esos (y éstos, porque ahora también los hay) jerarcas, estaban haciendo crecer una bomba de tiempo que terminaría por estallarle en las manos, ensuciando a la Iglesia, cosa que poco parecía (y parece) importarles.
Lo dije ya y lo repito, hay una secta infiltrada en la Iglesia que "sueña" con "otra iglesia", una iglesia no-católica sino mundana, que no condene (ni siquiera a los pervertidos) ni expulse a nadie, que sea "inclusiva" y buenista. Esa secta debe ser extirpada por la sencillísima razón de que sus miembros no son católicos y pretenden cambiar la esencia de la Iglesia, lo cual es una terrible profanación y un inmensísimo sacrilegio.
Debemos luchar para evitarlo cueste lo que nos cueste, y Dios dará el triunfo cuando lo estime oportuno.
---
LF:
Opino igual. Hace más daño a la Iglesia el obispo que encubre que el cura que abusa. Y no digamos nada cuando a quien se encubre es obispo o cardenal...
Los tiempos han cambiado. La revolución tecnológica ha tenido sus efectos buenos y malos, sobre todos, cristianos y paganos. La secularización del cristiano afecta íntimamente también a los sacerdotes. Así y en el fondo las patologías del mundo también les afectan.
Enlazando con el hilo del otro día de D. Jorge. Por poner por caso, en España ¿ Estimulan los ordinarios a sus sacerdotes a que se agrupen y se formen en vida cristiana ? ¿ Han visto esos ordinarios españoles las estadísticas que hablan de que un porcentaje altísimos de sacerdotes alemanes no rezan y que es, precisamente allí, donde el tema de los abusos ha tenido una mayor incidencia ? ¿ A qué esperan para ponerse manos a la obra y adelantarse a un más que previsible futuro y no esperar que ese futuro te aplaste como una losa ?
Las palabras del cardenal quizá yo también, entonces, las hubiera aplaudido. ¿ Para qué me voy a engañar ? Eran los tiempos de la inocencia, de la reverencia hacia lo clerical donde el gobierno de la iglesia era un arcano impenetrable.
Duele mucho ver cómo la ICAR que debería ser faro para la humanidad se dedica, al menos arriba, a tapar vergüenzas. La lección es clara: o te compras todos los medios de comunicación del mundo para que hablen bien de ti o debes vigilar mejor lo que tienes en casa.
Más quien pondrá el cascabel al gato?. A estas alturas se me antoja que solo una intervención de Dios, milagrosa, puede cambiar el rumbo.
Creo que la crisis supera las fuerzas humanas. Las palabras sobran. Todo está dicho y esperemos todo "lo posible" haya salido.
A mime duele el daño causado a aquellos que en vez de encontrar a Dios encontraron a Lucifer, rezo para que su alma sea sanada, aunque la cicatriz esté ahí. Me duele la Iglesia, que es vilipendiada y queda como una malhechor a a lis ojos de mundo que tan solo se rige por criterios humanos, o por prejuicios. Esto causa un daño colateral a las almas apartadas de Dios. Me duele saber que este pecado inflige a Cuerpo Místico de Cristo la peor de las condenas:lacerandolo, pecado sin arrepentimiento y conversión, yen el veo la Pasión de Cristo y la que nos espera a todos, pues todos sufrimos por estas abominaciones.
Habla de Benedicto XVI, de San Juan Pablo II y de Francisco. Uno es santo declarado por la Iglesia, dos forman parte de la Iglesia militante. El problema sigue ahí, me temo que continuará. No se han abordado las causas, se ha hablado de lo ya sabido, pero los medios tb son sobrenaturales, en definitiva la búsqueda de la santidad. Ni se menciona, ni está en la agenda cotidiana, del día a día.
Como creyente de a pie solo queda la oración y la penitencia. Que Dios disponga y actúe.
Me quedo "con expulsad al malvado entre vosotros", aunque suene poco misericordioso para los aires que soplan.
Ahora eso es imposible
Pienso que esto ya no se sostiene por muchos juegos malabares que quieran hacer la jerarquía. O C
Ahora bien, lo que no se entiende para nada es que el nuevo Código de Derecho Canónico que salió por esa época, 1983 si la memoria no me falla, en vez de endurecer las penalidades contra los consagrados pervertidos que pululaban como hongos después de la lluvia, al contrario, ¡¡las suavizaron!!.
Cabe preguntarse qué es lo que buscaban con eso, y porqué SJPII aprobó ese relajo.
---
LF:
Yo también me pregunto por qué se retiró la pena de excomunión para los católicos que entren en la masonería. Y me pregunto... muchas cosas.
----
LF:
...y como Juan Pablo II hizo mucho por removerla...
Mucho, lo que se dice mucho, no hizo. Por ejemplo, fue él quien creó cardenal a McCarrick a pesar de que Roma ya conocía sus andanzas con seminaristas. No digo que lo supiera el mismo papa polaco. Pero su gente más cercana, sin duda.
Con un elefante de este tamaño en el living, todo lo otro que se diga suena lamentablemente a broma.
Saludos cordiales
---
LF:
Del discurso de ayer del Papa quizás escriba mañana un post. Aparte de eso que señalas, hay otras cosa que llaman bastante la atención, y no para bien.
Por otra parte, un estudio psicológico de los seminaristas entiendo que es necesario, Incluso en mi empresa que sólo tiene 50 trabajadores todos los cargos de responsabilidad pasan un test en la selección simplemente para saber que son personas "normales"
Un saludo,
---
LF:
De toda la vida ha existido eso que se llama discernimiento vocacional. Y lo han llevado a cabo sacerdotes especialmente preparados para tal fin. No me opongo a cierto uso de la psicología como herramienta, pero ojo con convertirla en la fundamental.
En aquella época se estilaba imponer penas laxas a criminales. La Iglesia no hizo más que copiar tendencias que había en el Derecho Penal.
En España ni más ni menos que con Franco se aprueba el CP de 1973 que ha sido un coladero para delincuentes.
Ahora el péndulo empieza a girar en todos los ambientes se empieza a exigir endurecer las penas.
Por cierto los mismos medios de masas que piden mano dura contras curas ancianetes que delinquieron hace 30-40-50 años......justifican siempre que pueden a violadores de hogaño amparándose en un falso humanismo penal.
---
LF:
Tu última frase es muy, pero que muy acertada.
Por otra parte hay mucha gente que se va corrompiendo con la edad y quizás haya algún vínculo entre corrupcion e impunidad, más de uno de esos violadores al ver que era encubierto probablemente esto le hizo aumentar su perversidad.
Que McCarrick se hiciera esas fotos inmorales con los seminaristas....demostraba que ese sujeto presumía y se jactaba de sus crímenes.
Esa perversion solo te la hace alguien henchido del orgullo de saberse intocable.
Esto se lo escribo para que consulte una pagina web autenticamente
catolica de Estados Unidos, la cual aclara bien que este Sinodo de los
Abusos Sexuales del Clero no fue mas que una farsa. Consigase
un traductor si usted no entiende el lenguaje ingles. la pagina se
llama Church Militant, com
Con todo respeto,
Manuel Antonio
---
LF:
Sigo habitualmente a Michael Voris y su Church Militant. Desde hace años. Y últimamente también a Michael Matt, el de The Remnant. Precisamente Matt ha estado estos días en Roma cubriendo el evento.
Ha habido mucha relajación en la Iglesia, en los seminarios y mucha suciedad no expulsada a tiempo.
Con valores de verdad, estas cosas no hubieran ocurrido. O no es así?
Acaso robamos en los supermercados porque no haya nadie vigilando? Acaso matamos si no hay policías a la vista? Que el celibato es duro es indudable, tanto como para justificar abusos, no me lo creo.
Han faltado valores, valores fuertes, valores eternos, aquellos que te impiden delinquir, aquellos que ni te planteas porque están dentro tu piel. Así deberían haber sido en los sacerdotes que abusaron de niños y adolescentes. Porque no los tenían es algo que habrá que averiguar y solucionar.
Cualquier otra actitud significará volver cada varios años a discursos grandilocuentes y tan manidos que dejan de tener valor.
Lo que están derribando esos herejes es su propia iglesia falsa, que fue creada hace décadas por ellos mismos una iglesia que muchos fieles y muchos prelados han/hemos tenido que soportar durante demasiados años, muchos engañados, otros obligados pero todos con devoción Católica, a pesar de la nueva misa y a pesar de los lobos del ·"espiritu del vaticano II" que han intentando vanamente destruir nuestra fe.
Es el ciclo inevitable de la herejía, que es incapaz de mantenerse, porque solo la Verdad perdura. Así que hay que alegrarse de que lo que estaba oculto salga a la luz.
----
LF:
Seamos claros. Este Papa tiene dos opciones:
- desmentir lo que se ha publicado sobre su proceder en el caso Zanchetta.
- callar como hizo con las palabras de Viganó.
Pero hay una diferencia entre ambos casos. Con Zanchetta hay pruebas documentadas.
Y si es lo que parece que es -lo pongo en condicional-, su credibilidad y autoridad moral será cero.
---
LF:
A los que ya lo son, que se mantengan castos. Y a seminaristas y/o novicios, enviarles a casa
Cuando presentó su sencillísima "regla" fue objetada porque "solo" eran frases del Evangelio y nada más.
Y san Francisco sorprendido, pero sin ingenuidad, replica: "es el Evangelio lo que deseamos vivir".
Esa es, sin lugar a dudas, la salida a la crisis de cada época. Si creemos que no se puede vivir el Evangelio, es que ya hemos tocado fondo y toca derribar y volver a construir.
Sí, LF, pero es que la doctrina católica sobre el Ministerio Petrino NO descansa en la credibilidad y autoridad moral de la persona que lo ejerce.
Es decir, que no depende de la santidad del sujeto. De ser así, el último Papa con credibilidad y autoridad moral hubiera sido el último Papa santo, es decir: SAN PÍO X (por si hay alguna duda).
Yo considero que la credibilidad y autoridad moral de Bergoblio son cero ya actualmente, ¿y?
La adhesión del Pueblo de Dios al Papa es una consecuencia de la adhesión a la Tradición, de la que el Papa es garante. No hay tal cosa como una adhesión personal de los miembros del Pueblo de Dios a la persona del Sucesor de Pedro, eso es modernismo o no sé que -ismo. La adhesión es mediada por la Tradición, y a un Ministerio, no a una persona.
---
Dices:
... la doctrina católica sobre el Ministerio Petrino NO descansa en la credibilidad y autoridad moral de la persona que lo ejerce.
Digo:
Afortunadamente. Por eso me permito decir lo que digo. El problema es que muchos fieles, por una mala formación, sí lo relacionan.
Lo hemos leído y no sentimos consuelo, porque cuando el cántaro se rompe se derrama el agua que contenía y ya no se puede recoger con buenas palabras y consideraciones de pérdida. Además de lamentar lo sucedido, tendrán que convencernos de que lo van a solucionar, nos quedan dudas al respecto.
No es clericalismo, es lujuria.
https://www.aldomariavalli.it/2019/02/25/non-e-clericalismo-e-lussuria/
El escandalo de los abusos es inconmensurable, el daño también para la fe y para las personas, y para la credibilidad de la Iglesia. Y viene de hace tiempo, no es nuevo.
La solución está en las palabras del apostol San Pablo que ud acertadamente citó. Si se hubiera procedido de ese modo, como el apostol decía, este problema no existiría o no hubiera llegado a la magnitud que llegó.
¿Se hará así en el futuro?
Por lo visto, del primero al último de los obispos nadie ha encubierto a nadie.
Pero bueno, tranquilos, hemos sido informados de que abusos hay por todas partes y que la iglesia va a seguir no sé cuáles medidas de no sé qué organismo.
Desde hace décadas se están produciendo el abuso de que el clero predica doctrinas extrañas al Evangelio; y a ello se unen innumerables abusos litúrgicos y lo que es peor en relación con con el Sacramento de la Eucaristía.
¡Cuántos niños y jóvenes que se preparan para la primera Comunión o la Confirmación, han sufrido el abuso de recibir catequesis aberrantes!
---
LF:
Son cosas distintas. De hecho, entre los curas abusadores los hay ortodoxos en lo doctrinal tanto o más que heterodoxos.
Han pasado catorce años y seguimos en las mismas. De hecho tal es la preeminencia de la falsa iglesia, que actualmente los test servirían para identificar fácilmente a los nuevos protegidos.
Me parece muy elocuente que tengamos como cardenal camarlengo a Farrell, un protegido de McCarrick, Farrell cuyo afecto por su protector con el cual vivió seis años, se materializó insanamente en el propio escudo episcopal de Farrell y su explicación:
“El león rampante es homenaje a Theodore Cardenal McCarrick, Arzobispo emérito de Washington […] el oro y el rojo derivan del escudo del cardenal McCarrick, de quien fue obispo auxiliar […] Se incluye un campo azul en honor de la Virgen de Lourdes, en cuya festividad fue ordenado obispo de manos del cardenal McCarrick”. Allí lo tenemos todo un prefecto para los Laicos, la Familia y la Vida.
En la sección 'Cultura' se comenta con entusiasmo, aunque no comprendo por qué está en la página de 'Cultura', y con un titular general que dice:
"Pax franciscana (pero no de San Francisco de Así) en la teología moral", y en un recuadro y con letra negrita: "El Papa pide a los moralistas huir de "una idealización excesiva de la vida cristiana".
Parece que el "Ser perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto" (Mt V, 48) no debe tomarse muy en serio. Jesús a morir por los pecados del mundo, pero eso no tiene mucha importancia. Los mártires, los santos, fueron unos "ultras" que se pasaron siete pueblos y ¿para qué?
La vida cristiana, el amar a Dios sobre todas las cosas, con todo el corazón, toda el alma, todas las fuerzas y al prójimo como a uno mismo, son cantinelas bobas que no conducen a nada.
Pero claro, no nos damos cuenta que Dios es misericordioso y a pesar de haber entregado a su Hijo a la muerte, lo que hagamos o dejemos de hacer le trae sin cuidado, pues la puerta del cielo, ignoro si la estrecha o la ancha, está siempre abierta para todos, con independencia de cómo se haya portado en este mundo.
¡¡¡En fin, qué pena!!!
Ir a las causas. Coger la tijera y podar.
Eliminar toda colaboración, tdo encubrimiento, al que lo haga aplicar un principio:fuera responsabilidad, rezar, penitencia.
Enviar a la justicia civil a tdo aquel que haya delinquido, por acción u omisión.
Y aplicar el sabio consejo que LF nos recuerda de San Pablo. Cuatro medidas tajantes y drásticas
Eso es arrepentimiento y reparación
Porque no se hace?, la respuesta que me doy me asusta, sinceramente me turba el alma,. La salud mental no se ve afectada, gracias a Dios distingo bien lo que es la Iglesia y lo que podemos llegar a hacer quienes formamos parte de ella.
Claro que leyendo la entrevista de Mons. Blazquez, me he quedado inquieta. Nuestros pastores no se enteran de nada y son "sensibilizados por los medios de comunicación". Eso que se les presupone un conocimiento profundo del alma humana.
Me acordaba del Santo Cura de Ars, como discernia las almas, y ahora se necesitan los medios de comunicación para saber los tentáculos del mal, como lo corrompe todo y destroza la vida de quien cae en el o lo padece. Y semejantes pecados!!!. No doy crédito
Sin duda, pero también una purga profunda. Aunque me da que no vendrá de mano humana.
Church Militant, precisamente estos días, sacó el muy probable (al menos indiciariamente) reclutamiento de McCarrick por los servicios de Stalin en los 50, de infiltración de degenerados y depravados en seminarios para demoler la Iglesia desde dentro. Uno de los centros de reclutamiento estaba en... ¡S. Galo!
Vatican Sex Summit Report: Day One
The communists were incredibly successful in infiltrating the Church; McCarrick was one of their men
www.churchmilitant.com/news/article/vatican-sex-summit-report
En otro artículo se señala que el actual patriarca de Moscú Kiril fue uno de los agentes principales del KGB de infiltración soviética:
www.churchmilitant.com/news/article/italian-leader-of-tfp-francis-pontificate-has-been-an-eye-opener
---
LF:
En EEUU harían bien en no hablar de infiltraciones ajenas dado su historial de infiltración en Hispanoamérica a través de los grupos protestantes.
Yo voy a reiterar la causa mayor de esta situación y es la de los seminarios menores como en Inglaterra los internados.
Juntar a 200 chavales de entre 10 y 14 años lleva a algunos abusos; los que no profesaron llevan su desviación a su entorno, al igual que los que profesaron.
No es homosexualidad sino vicio sexual, como puede ser el bestialismo.
Como decía Torrente: "Sin mariconadas".
Las consagradas no tuvieron seminarios menores y la situación es más limpia.
In Domino.
----
LF:
La Iglesia, hoy, sólo puede imponer penas canónicas. Las otras es cosa de los estados.
---
LF:
No lo afirmo, no lo descarto.
Pienso que tal vez estemos esperando catástrofes naturales como signo. ¿Pero no es el estado actual de la Iglesia, la que está poniendo en grave peligro la salvación de las almas?.
LF, comparto su opinión.
«En EEUU harían bien en no hablar de infiltraciones ajenas dado su historial de infiltración en Hispanoamérica a través de los grupos protestantes.»
Muy cierto, pero no olvidemos que esa infiltración fue respuesta a las teologías de la liberaciones y demás rojerío. Antes de que la Iglesia en Iberoamérica (o incluso en España) perdiera la Fe, los protestantes no se comían un rosco, ni con toda la financiación del mundo.
Ampliando el horizonte: los abusos sexuales sólo son un capítulo dentro del marco más amplio de los abusos de poder que contradicen el espíritu de servicio que Jesús nos pide. No lo digo para quitarle importancia al tema, pero parece que en la Iglesia a veces nos olvidamos de que el poder ejecutivo debe ser ejercido dentro del marco de la ley, es decir, que hemos de ser justos como Dios es justo. Ejercer el poder no significa tener un cheque en blanco.
Reformar la Iglesia va a costar más que enseñarle a un elefante a bailar el tango... pero si Jesús consiguió resucitar a Lázaro con lo podrido que estaba y lo mal que olía, todo es posible, pero sin mano dura y paciencia no lo conseguiremos.
Eso es lo que yo llamo un momento de lucidez.
Dice que a veces no se ha escuchado a las víctimas y que lo que se hacía era cambiar a esa persona problemática a otro sitio convencidos de que no va a dar más problemas.
Exacto; lo que se venía haciendo como praxis confirmada por las palabras que Vd dice que oyó al cardenal Castrillón Hoyos. Como puede creer el cardenal Blázquez que el que escucha ese reportaje siendo católico o sin serlo se va a tragar que un superior obispo o lo que sea va a ser tan inocentón de pensar que retirarlo a otra parroquia o lugar servirá para que no repita. Es de locos, es mejor que no hagan ninguna declaración porque más que cómplices y encubridores pensaremos que son idiotas.
Es mejor que se diga y deberían decirlo que en cierto pontificado y tras el Concilio Vaticano II mal entendido hubo relajación de costumbres, la secularización de la sociedad afectó profundamente al clero, la praxis del Concilio fue desastrosa en materia de autoridad que se resquebrajó y litúrgica. Para evitar el escándalo desde muy arriba se dió esa consigna, se rebajaron las penas canónicas siguiendo la moda buenista del derecho penal, se tapó la boca de víctimas con dinero etc. De esa época en la que el humo del infierno se había colado por alguna rendija, y que el que lo dijo contribuyó no poco en que se colara, vienen todos los males producto de los enemigos internos, de la infiltración masónica, la homosexualista y la marxista junto a los escándalos del dinero.
En ese encuentro sobre protección a los menores en la Iglesia, no he detectado ese brío necesario para erradicar en lo posible el mal que asola en nuestra Santa Iglesia Católica.
Por poner un ejemplo, me confunde que el estadounidense jesuita padre James Martín, sea uno de los consultores de la Secretaría de Comunicación del Vaticano, nombrado por el Papa Francisco. ¿Que hace un sacerdote jesuita en el Vaticano que defiende las relaciones homosexuales, contrariando a la Sagrada Escritura, la Tradición y el Magisterio bimilenario de la Iglesia.
Gracias por la clarificacion de tu artículo o post.
El Señor te bendiga y te guarde.
---
LF:
Yo de este pontificado no espero nada.
Dejar un comentario