Sieg Heil, Heil, Lobby Gay!!
Si eres un ciudadano de Malta, homosexual, y quieres dejar de serlo, debes ir olvidándote de buscar ayuda profesional psicológica/psiquiátrica. Cualquier médico que quiera ayudarte puede acabar en la cárcel.
Sin embargo, si eres un joven de 16 años de Malta que naciste hombre y te sientes mujer, ni siquiera tendrás que pedir permiso a tus padres para someterte a una operación de cambio de sexo. Idem si naciste mujer y te sientes hombre y quieres llenar tu cuerpo de hormonas masculinas. Y quien dice Malta puede decir España u otros países europeos.
Me pregunto si habrá comisiaros políticos que husmeen en las consultas y quebranten el secreto profesional entre doctor y paciente para evitar que ningún médico ose ayudar a un homosexual a dejar de serlo.
La dictadura facistoide del lobby gay está actuando a buen rendimiento. Pero no van a parar. Bien saben ellos que en el mundo hay multitud de casos de homosexuales que tras una conversión al cristianismo -en cualquieras de sus variantes- dejaron de serlo. No es solo que muchos de ellos, por gracia, dejaran de vivir en pecado, no. Es que a muchos otros Dios les concedió la gracia de cambiar su orientación sexual. Yo he conocido, personalmente, ambos casos. El de quien sigue siendo homosexual pero vive en castidad, y el de quien dejó de ser homosexual. ¿Acabarán encarcelando a los sacerdotes o pastores que participen en esos procesos de conversión?
Ahora que la Iglesia ha reafirmado su intención de no admitir como candidatos al sacerdocio a «los que practican la homosexualidad, presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas o apoyan la así llamada cultura gay», ¿cuánto creen que tardará el lobby gay en presentar demandas contra esa ley eclesial acá y allá?
Mucho me temo que esto acabará mal, muy mal. El péndulo de la historia puede pasar de un lado a otro rápidamente. Y los homosexuales serán las primeras víctimas de una posible contrarreacción.
Luis Fernando Pérez Bustamante