Enhorabuena a los provida y profamilia peruanos que apoyaron a Kuczynski
Bravo muchachos, lo han conseguido ustedes. En base al mal menor prefirieron apoyar al señor Kuczynski (PPK), el amigo de Soros, para que pasara a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales y luego ganara a Fujimori. Y este ahora va a llenar el país de uniones homosexuales y de abortos legales (vía píldora del día después).
He de reconocer que no han sido ustedes originales. En España sabemos mucho de eso. La idea es siempre la misma: Mal menor. Aquí el mundo provida y profamilia ha seguido el modelo “vamos a votar o apoyar a estos, que parecen menos abortistas y más profamilia que aquellos. Nunca podemos apoyar a los que en realidad creen lo mismo que nosotros porque no van a salir diputados y es tirar el voto". Han preferido tirar la conciencia que el voto. Han preferido apoyar y votar el mal, aunque se llame menor, que el bien.
En el caso de Perú, fue especialmente lamentable ver a quienes durante años protagonizaron noticias y entrevistas defendiendo el derecho a la vida y la institución familiar venderse por un plato de lentejas de falsas promesas. Unas lentejas que han ido a parar a la cazuela de los lobbies gays y abortistas. Esa gente, cuyos nombres no voy a revelar pero todo el mundo conoce, ha perdido toda autoridad moral para salir ahora a reivindicar los valores que ellos entregaron en manos de PKK. Lo mejor que podrían hacer es tener la decencia de callarse, de esconderse, de mirar para otro lado.
¿Y la Iglesia en Perú? Pues como en tantos otros sitios. Salvo un par de prelados que alzan la voz y reciben la acusación de ser radicales a los que conviene aparcar en un desván, el resto pone cara de vaca que mira al tren mientras pasa.
(ironía on) Menos mal que ahora que la PUCP va a cobrar nuevos bríos tras el cambio de sus estatutos, el catolicismo peruano podrá rearmarse moralmente, formando cuadros medios preparados y educados en los valores existenciales del evangelio y el magisterio católico. O sea, como pasa en España con el CEU desde que el señor Dagnino abandonó la presidencia de la ACdP. (ironía off)
Luis Fernando Pérez Bustamante