Discreción cardenalicia: bien para la Iglesia aunque moleste a los periodistas
Hace unos días escribí un artículo pidiendo a los cardenales que hiciera el favor de moderarse en sus declaraciones a la prensa. Acababa el mismo de la siguiente manera:
Por tanto, si me preguntan cuál sería mi deseo de cara a lo que pueden decir los cardenales de aquí al cónclave, lo tengo claro: que hablen poco y que aprovechen la ocasión para predicar el Evangelio.
Parece que en las congregaciones cardenalicias previas al cónclave han llegado a la misma conclusión. Estábamos asistiendo a una sobreexposición mediática de purpurados poco recomendable para el momento actual de la Iglesia. Podríamos haber llenado la página de InfoCatólica solo con declaraciones de cardenales de acá y de allá. Y, sinceramente, no todas eran dignas de elogio.
Ante la inmensa responsabilidad de elegir Papa, los cardenales deben dedicar todo su tiempo a hablar entre ellos y rezar. Entiendo que los periodistas presentes en Roma para el cónclave estén con un enfado considerable ante la tesitura de pasarse un par de semanas sin poder dar un titular que emane de las palabras de un prelado. Es comprensible que desde ayer algunos se pregunten: ¿qué hacemos aquí? ¿para esto hemos venido? ¿para esto se ha gastado nuestra empresa un dinero importante? Pero antes está el bien de la Iglesia que el interés de los profesionales de la información.
Es bastante posible, por no decir absolutamente seguro, que algunos empiecen a rellenar su falta de fuentes de información practicando el deporte de la rumorología. O incluso el de inventarse cosas que no son ciertas. Por ejemplo, hay quien ya ha “informado” que a los cardenales de EE.UU se les ha pedido que se callen a cambio de que tengan acceso al informe de Vatileaks. O sea, “tú te callas y yo te cuento". Hay que ser muy obtuso para creer que las cosas funcionan así en la Iglesia. Los cardenales no son personas a las que se pueda tratar como si fueran niños de primaria, en plan “Juanito, si te comes el puré te dejaré jugar con la consola un rato".
A falta de noticias veraces, crecerá el fenómeno de las “profecías” (no se pierdan el trabajo recopliatorio de Juanjo Romero) o análisis sobre cuál será el próximo Papa. Que si un italiano, que si uno de Hispanoamérica, que si otro de Asia, que si aquel de África, que si a lo mejor otro europeo. O sea, lo mismo de todos los cónclaves desde que hay prensa cubriéndolos. Pues nada, camaradas, que os cunda.
Luis Fernando Pérez Bustamante
15 comentarios
Luis Fernando, pareces aquel que no quería las uvas porque estaban verdes. En el fondo, como a todo informador, te encantaría estar en el Vaticano haciendo entrevistas a Cardenales, sacando algo de información y viviendo el momento. Nada más sabroso para un periodista o un informador que poder cubrir un cónclave o un acontecimiento de esta envergadura. No hay que ser excesivamente mojigato, que, al final, todo se sabe y es peor.
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LF:
Aunque soy director de un medio de comunicación, me considero católico antes que otra cosa. Ya dije que, en estos momentos, de los cardenales solo espero prudencia y, si acaso, que expliquen la doctrina de la Iglesia cuando estén ante un periodista. Sé bien lo que es tener información "secreta" o "discreta". Y lo que tienta averiguarla, aunque solo sea para conocerla y no publicarla. Eso es muy "carnal". Así que no me apetecería lo más mínimo esta ahora en Roma. A menos que fuera como turista o peregrino, claro.
A todo esto, ayer sucedió algo que me temía y que me molestó: paparazzis filtran las primeras fotos del retiro de nuestro Papa emérito. Si bien es cierto son inofensivas y se ve a Benedicto XVI caminando por los jardines de Castelgandolfo con su secretario, y aparentemente rezando también el rosario (cosa que el Papa hacía comúnmente en sus tiempos de descanso), mostrándose así la imagen de un hombre de Dios, me parece que el que haya paparazzis sacando fotos y perturbando de algún modo la vida monástica de nuestro anterior Papa, puede motivar a tejer rumores, hacer especulaciones e inventar cosas sobre qué es lo que hace durante su retiro. A mí no me gustaría que cuando estoy en mis Ejercicios espirituales anuales o en algún retiro de silencio me estén tomando fotografías o espiando. Es llamar al demonio a perturbar una instancia que es exclusivamente de Dios.
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No paran. Andan loquitos Vidal y Bastante inventando a todo inventar. Ya sabemos que cuando estos dos inventan, ya puestos, mejor inventar burradas; vamos, que no Dan Brown. Y no digo más para no incitar a nadie a entrar en ese lugar infecto ni por curiosear.
Y como interpretamos este titulo de un blog en Infocatolica?
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LF:
Como el artículo de un vaticanista que escribe en este portal. Por cierto, Andrés lo está haciendo la mar de bien en las últimas semanas
En el caso de los de EEUU a mi por lo menos me ha abierto los ojos en cuanto que quizá no esté preparado ninguno de ellos para ser Papa por ahora.
Creo que han perdido su posible candidatura real entre los demás cardenales.
Prudencia.
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Exacto, Luis Fernando, no hay nada que objetar.
Yo estoy de acuerdo con de la Cigoña:
"En días pasados hemos visto como afloraban muchos nombres, lo que ES NORMAL EN SEDE VACANTE y más cuando no hay un cardenal de gran carisma"
Pero veo que en Infocatólica estos últimos días se critica mucho los comentarios y pronósticos sobre los papables y no estoy de acuerdo porque no es pecado ni inmoral que a uno le guste un cardenal como Papa y le disguste otro. A mí me gusta Ranjith y me disgusta Bergoglio. Ofendo? Extraño sería que yo asegure que Ranjith será el próximo Papa (además nadie lo nombra :) ) pero si así fuera estoy segura que quien me lea le importará un comino mi "profecía". Y si un "profeta" acierta pensaremos que fue coincidencia. En fin, tolerancia con los comentarios que nos disgustan.
Lo que quiero decir es que los laicos no somos niños a quienes hay que decirles qué deben opinar y que no. Mientras sean educados, toda opinión es bienvenida, aunque se trate de un error y no faltará otro laico que le corregirá.
Parece que tampoco podemos decir que queremos un Papa enérgico. Con una curia ingobernable es necesario que el próximo Papa tenga carácter fuerte. Y no me baso en "rumorología" para decir que hay problemas de gobierno y facciones que luchan por el poder, sino en las palabras del propio Benedicto XVI (carta del 2009 sobre el levantamiento de excomunión a obispos lefebvristas):
"Me ha entristecido el hecho de que también los católicos, que en el fondo hubieran podido saber mejor cómo están las cosas, hayan pensado que debían HERIRME con una HOSTILIDAD DISPUESTA AL ATAQUE"
"Si os mordéis y deboráis unos a otros, terminaréis por destruiros mutuamente""
la "suciedad" y "la mayor persecución está dentro"
Por eso muchos pedimos un Papa enérgico que ponga orden en la casa.
En lo opinable, libertad. El clericalismo laico no va...
- La lucha con los medios y su invasión, es "la madre de las batallas" culturales en la sociedad actual.
- No es con ellos con quienes hay que quedar bien, sino con los católicos de " a pie", los cuales sabemos esperar y seremos leales seguidores del Papa electo.
- Estoy hasta la gorra del "agenda setting",de la manipulación de nuestros enemigos por los mass media, de que opinen y pregunten en mi nombre adjudicándose una representación que no les he dado.
- Son cobardes ¿porqué no son tan incisivos con los musulmanes? Allí hay noticias en cantidad, pero les temen.
En resumen, los católicos somos otra cosa, mantengamos nuestro estilo, nuestras modos, costumbres y ritos. Aún nuestro Primer Mandamiento no es la "Libertad de prensa"
Que el Señor nos proteja
http://www.diariodesevilla.es/article/sociedad/1475508/golpe/mano/la/cupula/vaticano/para/acallar/los/cardenales/rebeldes.html
Sin embargo, está claro que la discreción es fundamental en la vida para tomar cualquier decisión seria. La actitud de los cardenales norteamericanos viene a demostrar que, a pesar de sus indudables virtudes, no están todavía a la altura que se necesita para ser papa.
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LF:
Las normas son las normas. Ya lo tuiteé.
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