Lo de China no tiene solución mientras continúe la dictadura comunista
Si alguien tenía alguna duda sobre cuál es el futuro de los católicos chinos, que lea la noticia que damos hoy sobre el artículo escrito por el líder de la mayor dictadura que existe en el mundo.
Ese tipo empieza acusando al Papa de ser más político que líder religioso por cometer la osadía de pedir libertad religiosa en su país. Además, manda al cubo de la basura cualquier posibilidad de mejora en las relaciones entre China y la Iglesia al asegurar que “mientras el Vaticano rechace suspender sus lazos diplomáticos” con Taiwán, e insista en arrogarse el derecho a designar a los sacerdotes católicos en China, será difícil conseguir mejoras permanentes". Pues nada, no habrá mejoras permanentes, caballero.
Hu Jintao demuestra una “ignorancia” perversa el acusar al Papa de querer “reinar sobre todos los católicos del mundo”. Pero vamos a ver, ¿no hay nadie que le diga a ese dictador comunista que la fe católica tiene como uno de sus pilares el ministerio petrino por el cual el Papa, sucesor de Pedro, tiene autoridad sobre toda la Iglesia? Me cuesta dudar que no lo sepa y por ello he puesto ignorancia entre comillas.
Dice el presidente de los comunistas chinos que “el Vaticano debe aceptar el hecho de que existe libertad de credo en China, siempre y cuando la religión no entre en contradicción con las leyes del país". A lo cual le vamos a responder que “Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres“ (Hch 5,29). Es decir, aunque la obediencia a la autoridad constituida es un deber cristiano (Rom 13,1 y ss), cuando la misma interfiere con la voluntad divina, ésta prevalece. Si lo entiende el dictador, y de paso los dirigentes demócratas, bien. Si no, también.
La esencia de la postura de la dictadura china, que conviene no identificar con el pueblo chino, principal víctima del comunismo que le está tiranizando desde hace décadas, se resume en esta afirmación de su presidente: “China tiene una gran cantidad de católicos, así como de musulmanes, budistas y taoistas. Si cada grupo se subordinara a un centro de poder foráneo, China quedaría incompleta". El comunismo lo quiere controlar todo. No acepta que haya nada ajeno a sí mismo que pueda influir sobre el alma y la conciencia de sus súbditos. La presencia de una entidad religiosa que salte las barreras del Estado y haga verdaderamente libres a los hombres, siquiera sea tan sólo en el ámbito espiritual, no es admitido por la dictadura del terror que aplasta bajo su bota a todo un pueblo.
De hecho, lo que Hu Jintao hace es señalar a la Iglesia Católica como una verdadera fuente de libertad para el pueblo chino. El poder foráneo al que alude el dictador es en realidad el poder de Cristo, que ha dado plena autoridad a su Iglesia, la cual no puede ni debe doblar la rodilla ante dictadores de ningún tipo que quieran someter su actividad apostólica. De hecho, la dictadura comunista china pasará, como pasó la dictadura comunista soviética, y la Iglesia permanecerá en pie, dispuesta a predicar el evangelio entre los chinos.
El comunista acaba diciendo que lo que la Iglesia “exige de China es poder, no refrendar las verdaderas bases de la creencia católica". Es decir, otra vez la “ignorancia” perversa. Pero añade algo que, mucho me temo, es cierto. Dice que “hasta ahora, sus acciones no han conseguido mucho apoyo mundial". Efectivamente, el mundo no apoya la libertad religiosa ni en China ni en ningún lugar. Los países occidentales miran para otro lado mientras se forran haciendo negocios con una dictadura que en su acercamiento al capitalismo ha encontrado el combustible necesario para sobrevivir. Y es que ya sabemos que para Occidente los derechos humanos dejan de ser derechos cuando hay dinero y negocio de por medio. Ocurre con el aborto, ocurre con las dictaduras.
Eso sí, la última frase de Hu Jintado demuestra que como profeta no tiene futuro. Al menos eso espero. Dice: “Más tarde o más temprano, el Vaticano tendrá que ajustar su política hacia China". A menos que el Vaticano se traicione a sí mismo y a los mártires chinos, tal cosa no ocurrirá. Y si llegara a ocurrir -quien tenga ojos para leer, que lea- el Señor actuará en consecuencia.
Luis Fernando Pérez Bustamante
15 comentarios
Muy diferente al conflicto con el totalitarismo liberal occidental, en cierto modo más peligroso y sutil, porque directamente quiere sustituir los valores de la Iglesia y de sus miembros por la religión moderna del Hombre.
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LF:
De momento aquí la Iglesia puede nombrar a sus obispos y no existe una iglesia patriótica traidora y cismática. Y nada podría hacer el actual sistema político en España si los católicos bautizados, la inmensa mayoría de los ciudadanos de este país, se hubieran comportado como verdaderos católicos.
Quizás peque de optimismo, pero tengo la sensación de que este inmenso país, China, está preparado, una vez muerto el comunismo ideológioco (sustituido por una dictadura con la única ideología del poder y la producción), para asumir como nunca los valores y la fe cristiana. Y por paradójico que suene, la persecución es la fuerza más eficaz que ayudará a ello.
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LF:
Pues yo no veo miedo en sus palabras. Más bien quiere meter miedo a Roma.
Puede que el Sistema “de momento” haya conseguido que los católicos queden ofuscados y confundidos, lo cual es un tremendo “logro”. Porque el Sistema está basado en una cuasi-blasfemia, que el Presidente del Gobierno se encarga de recordar de vez en cuando: “hay que obedecer a los hombres (que votan mayoritariamente) antes que a Dios”. Y nadie dice ni mú, empezando por los máximos responsables de la obediencia divina, que ayudaron a traer esta cuasi-blasfemia y todavía de vez en cuando la elogian, irresponsablemente.
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LF:
¿Que nadie dice ni mú?
Así, sin ir más lejos y sin buscar mucho:
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=5667
http://infocatolica.com/blog/coradcor.php/la-democracia-deja-de-ser-un-sistema-leg
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=4830
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=5738
Dicho lo cual, no es ese el tema principal de este post. El tema es China y la Iglesia en China. Por tanto, no más comentarios sobre lo que ocurre en España. No serán publicados.
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LF:
No son discordantes. Siguen lo dicho por los Papas en relación a las democracias que se saltan todos los límites éticos y morales pre-democráticos. The end.
¿Tendrá que ver con la común animadversión a la Iglesia de zp y de los comunistas chinos?
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LF:
Simplemente tiene que actuar como si no existiera. Es decir, apoyar a los verdaderos católicos, dejar muy claro que los de la iglesia patriótica son unos cismáticos traidores y pedir una y otra vez ante el mundo entero que haya libertad religiosa en China y en el resto del mundo.
Con respecto a China, en fin... comunismo, nada nuevo que no sepamos. Eso si, un poquito edulcorado para no dar tan mala imagen y poder vender sus productos.
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LF:
Estoy en un tris de no dejar comentarios en ninguno de mis posts. Y no es una broma. Si no fuera el director del portal, ya habría tomado esa decisión.
Lo de la edulcoración de la imagen de la dictadura china es puro cuento... chino, nunca mejor dicho. Ahora bien, me pregunto cómo reaccionarían si Occidente entero aplicara a las empresas chinas la misma política que China a la Iglesia Católica. Es decir, que se considerara la presencia de las empresas chinas como intromisión de una autoridad extranjera. Al fin y al cabo, siendo China una dictadura, nadie puede pensar que sus empresas son libres para tomar decisiones económicas que pueden afectar a otros países. Lo más normal es que creamos que actúan todas bajo indicaciones políticas d elos dirigentes comunistas. Razón más que de sobra para llegar a nacionalizarlas, si la cosa se pone fea.
"Con la decisión de nombrar a un presbítero, y no a un obispo, ni siquiera a un obispo de la llamada “Iglesia clandestina” (denominación superada tras la Carta de Benedicto XVI a los católicos chinos), se fortalece la línea de Benedicto XVI y de la secretaría de Estado. Es decir, se legitima continuar el diálogo y no cerrar las puertas a la negociación, a pesar de la involución en el último período y los intentos para tratar de controlar la Iglesia Católica".
Ver aquí
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LF:
Yo supongo que Roma cree que si se lanza a degüello públicamente contra China, los católicos chinos sufrirán un aumento brutal de la represión. Así que lo de templar gaitas puede ser una medida prudente, siempre que no se renuncien a los principios básicos que no pueden ser dejados a un lado por la propia Iglesia. Pero también es cierto que con Satanás no vale templar gaitas.
Así: el derecho a la objeción de conciencia de la persona frente a leyes, decretos y sentencias injustas e inicuas, el rechazo a la obediencia a las autoridades chinas (perdón, civiles) cuando sus mandatos son contrarios a la recta conciencia, la resistencia a la opresión (bajo condiciones) y la misión de la Iglesia a emitir juicios morales sobre materias que afectan al orden público.
También Hu Jintao se habrá mirado muy atentamente el 2244, cuando afirma que toda sociedad (democrática o no) que ignora o rechaza un criterio objetivo del bien y del mal (Dios Creador y Redentor) acaba ejerciendo un poder totalitario, declarado o velado, sobre el hombre y la sociedad.
Hu Jintao habrá observado que, en algunos paises protestantes europeos, existe (o existió hasta tiempos recientes) una religión oficial del Estado, con un Rey o Reina como Jefe de la Iglesia y un Parlamento que nombra obispos o interviene en las cuestiones de fe, moral, disciplina y organización a través de la ley, o existen paises euroorientales en que la Iglesia Ortodoxa es una iglesia nacional. ¿Por qué Hu Jintao va a ser diferente?
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LF:
Hombre, si quiere fundar la iglesia anglicanochina, es libre de hacerlo. De hecho, eso es lo que viene a ser la iglesia patriótica. Pero que deje a la Iglesia Católica ser Iglesia Católica.
DANI - Y sin que se ponga fea, recuerda que estamos en una república bananera practicamente.
¿Contestarás a mi E-mail?
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LF:
No tengo constancia de haberlo recibido. Miraré en la carpeta de spam.
LF bis:
Ya lo vi. Solucionado el tema. Ayer no andaba yo por acá.
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