¿Cristianos sin cruz?
Los cristianos en general, y los católicos en particular, se han distinguido porque el seguimiento de Cristo les ha llevado a dar la vida por los demás de formas muy variadas. Unas veces literalmente dando testimonio con su martirio, otras ayudando a los necesitados. No por “buenismo humanista”, sin no por fe en Cristo Jesús, para que de una forma u otra su mensaje llegase a todas partes.
La educación ha sido una de las formas elegidas por multitud de órdenes religiosas (Maristas, Salesianos, Escolapios, Jesuitas…, etc) como una forma de evangelización, a la par que también se ayuda a los pobres a labrarse un futuro. Pero sin olvidar nunca que lo primordial es ser cristiano, y lo demás viene dado por añadidura. ¿O ya no es así?
Recientemente he escuchado al responsable de una orden religiosa en Sudán decir que ellos no evangelizan. Que educan técnicamente, y llevan los valores de su fundador a la gente “de forma implícita”. Que estos valores son universales y que los musulmanes los aceptan bien. Excepto los extremistas.
En otro colegio religioso (omitiré el nombre) algunos padres han protestado “porque se da clase de religión y se reza por la mañana”. Sí, como lo oyen.
En un tercero, centro dependiente directamente del obispado de mi ciudad, ya no se ve ni una cruz por ningún lado. Al preguntar un día la razón de ésto, la respuesta fue “no vayamos a espantar a los alumnos”. El centro es privado, si se me permite la maldad.
Entre gente de Iglesia, y supongo que de buena fe, hoy se tiende a desdeñar la cruz. “No conviene ser exagerados” dicen. “Eso podría echar a la gente afuera”…
Las vocaciones no cesan de caer, la asistencia a la misa dominical (de la diaria para que hablar) lo mismo y de forma alarmante la edad de los parroquianos sube y sube.
Y no solo es que la gente sea perezosa o acomodada, o sea débil. Es que además critican a quienes tratan de llevar una vida cristiana practicante de “ultracatólicos” e incluso de “talibanes”.
Ser Cristiano significa precisamente abrazar nuestras cruces. Grandes y pequeñas, diarias y extraordinarias. No con ánimo masoquista del sufrir por sufrir, sino porque el mismo Cristo lo hizo para nuestra salvación. Y por ello huir de la cruz, es huir de Cristo mismo.
El ejemplo de los mártires (hoy casi olvidados, porque parece que sus historias escandalizan en lugar de enseñar) fue uno de los principales ejemplos evangelizadores.
Todas las religiones piden que recemos a un dios, que realicemos unos ritos, que celebremos unas fiestas, que tengamos una moral, que ayudemos al necesitado…pero solamente una religión, la cristiana, nos pide que amemos al enemigo, que amemos nuestra cruz.
…Y mientras tanto ¿Cuál es la realidad hoy, frente a la de esa época dónde ser cristiano era jugarse la vida y por el contrario los miembros de la Iglesia no dejaban de crecer día a día?:
Católicos que no van a misa. Que no comulgan. Que no confiesan (o si lo hacen es “con Dios”, no “con el cura”).
Católicos que no guardan la castidad. Que no están abiertos a la vida. Que utilizan la anticoncepción, que justifican el aborto “en algunos casos” (cuando no siempre); y de igual manera defienden la eutanasia de los enfermos, “para que éstos no sufran”.
Católicos que se incineran. Que desobedecen el magisterio de la Iglesia,
Católicos que ya… ni rezan.
¿Llegaremos a ver “católicos” que ya ni se bautizan?.
Hoy me pregunto qué pensaría esta sociedad de los siete mártires macabeos, quienes delante de su madre, quien no cejaba de animarles, sufrieron toda clase de torturas y finalmente la muerte con tal de no desobedecer a Dios.
Eso sí, cuando hablo de la sociedad de hoy, me refiero a la nuestra, a la occidental. Que con nuestro estado de bienestar ha sacado a Dios afuera para que qnos quepan más cosas.
Porque mientras estamos en nuestro sofá, a pocas horas de avión de nuestras ciudades, gente como Asia Bibi en Pakistán, o Mariam Ishaq en Sudán nos siguen recordando que es la fe. Condenadas por cristianas, abrazan su cruz.
Pablo Santos
12 comentarios
Que Dios bendiga a Pablo Santos y que estas palabras las asimilemos y hagamos nuestras.
PD: En estos tiempos, vemos a futbolistas, no sabemos si católicos, sustituir la señal de la cruz por ambos dedos índices hacia el cielo cuando hacen un gol. Una moda de expresión religiosa light, que archiva la señal de la cruz. Pero acordarse de Dios es mejor que nada.
1176.3 "La Iglesia aconseja vivamente que se conserve la piadosa costumbre de sepultar el cadáver de los difuntos; sin embargo no prohibe la cremación, a no ser que haya sido elegida por razones contrarias a la doctrina cristiana".
Siendo efectivamente éste un tema menor (ni comparable la desobediencia en otros como el aborto por ejemplo) no deja por ello de ser un signo de la paganización de la sociedad.
La tradición cristiana es dar sepultura a los cuerpos.
Efectivamente prohibido no está (solo se prohibe quien se incinera por seguir un rito pagano por ejemplo )pero la Iglesia prefiere y aconseja la sepultura, dejando la cremación para casos de extrema necesidad (catástrofes naturales, guerras...) donde se puede generar un peligro de epidemia.
Hoy, nos hemos acostumbrado tanto a "otras costumbres no cristianas" que ya pensamos que lo mismo es una cosa, que otra.
Cuando un católico no evangeliza, es porque simplemente ya no cree que fuera de la Iglesia no hay salvación. Los encuentros interreligiosos se multiplican y en ellos la Católica es una religión como cualquier otra.
En cuanto a la incineración, se expande con el pretexto de la falta de espacio, pero en realidad ya nadie quiere velar a los muertos ni enterrarlos: es tan romántico revolear las cenizas por cualquier parte! Y aquí la ecología se la relega hipócritamente, puesto que esos hornos son altamente contaminantes.
Aun así, me gustaría saber que es aquello de estar abierto a la vida (ya sabemos los más despiertos de donde lo escuchó), ¿ha leído usted la "Humanae Vitae" de Pablo VI? Porque muchos la citan y pocos la han leído, ¿por qué algunos se erigen en interpretadores de esta u otras encíclicas? Si la leyera, comprendería que tan deleznable es tener menos hijos de los que Dios quiere como más de los que quiere. Usted dirá ¡Eso es imposible!, pues oiga Dios trabaja adecuando su voluntad a las inobservancias de los hombres para llevarlos hasta su voluntad; o sea, que también es posible. Exultar la ley por encima de todo no le hace mejor cristiano.
¿Ha intentado usted dar catequesis en esos colegios que critica? ¿Ha dado usted cobijo, ayuda y comprensión a alguna mujer que piensa abortar? Es muy fácil criticar y exhortar a la cristiandad a que cambie desde el sofá o desde la pantalla de un ordenador. La gente como usted considera que ha inventado la fe, avísenos cuando podamos ir a que nos selle nuestro documento de fe cristiano.
Saludos.
Y sin embargo, como don Pablo nos recuerda la doctrina de la Iglesia sobre esas cuestiones, recibe la crítica y la acusación, esta sí de forma personal, del tal Carlos.
Líbrenos Dios de aquellos que acusan con el dedo a quienes se limitan a recordarnos aquello que la Iglesia enseña.
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LF:
Zulema, eso solo se soluciona denunciando la situación a la policía. Bastaría con una llamada anónima, seguramente.
"14. En conformidad con estos principios fundamentales de la visión humana y cristiana del
matrimonio, debemos una vez más declarar que hay que excluir absolutamente, como vía lícita para la regulación de los nacimientos, la interrupción directa del proceso generador ya iniciado, y sobre todo el aborto directamente querido y procurado, aunque sea por razones terapéuticas
Hay que excluir igualmente, como el Magisterio de la Iglesia ha declarado muchas veces, la
esterilización directa, perpetua o temporal, tanto del hombre como de la mujer (15); queda
además excluida toda acción que, o en previsión del acto conyugal, o en su realización, o en el desarrollo de sus consecuencias naturales, se proponga, como fin o como medio, hacer imposible la procreación."
Gracias por el artículo, que Dios le bendiga.
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