El Ebro guarda silencio
El Ebro guarda silencio al pasar por el Pilar… así reza la jota zaragozana. Se oye poco, guarda silencio, y las ventanas del Palacio Arzobispal se apagan tarde, quizás muy tarde… parece que no pasa nada… y pasa de todo!!! y en poco tiempo nos encontramos con un seminario lleno y se abren nuevas parroquias… La Basílica está más bella que nunca! y el Stand de la Santa Sede de la Expo y las peregrinaciones a Ars… ¿Cómo poder agradecer en esa tierra tanto bien?
Sin duda y sin merecerlo, Dios ha concedido a esa diócesis española abundantes gracias de la mano de don Manuel Ureña “Huracán Ureña” y de don Gonzalo Ruipérez, todo un “guerrero”, su secretario personal. Y parece que no pasa nada… y pasa de todo… ¿nos tendrán reservada alguna sorpresa por el año sacerdotal? Y Don Gonzalo y Don Manuel guardan silencio –como el río Ebro- al pasar por el Pilar.
José Luis García
4 comentarios
No es solo llenar el seminario, es el vaciado y tirado de todos los libros herejes que poblaban sus estanterias en los años anteriores, dedicados a alejar a nuestros sacerdotes de la Fe.
Conozco bien a monseñor Ureña, un hombre algo arrebatado pero santo y de buena ley, y a su excepcional secretario, Gonzalo. Tuve la suerte, hace tiempo, de trabajar con ellos cuando se estaba levantando la diócesis de Alcalá. Cuenten, ellos y los zaragozanos, con mis oraciones.
Hay una frase que dice: "Hace más ruido un árbol que cae, que todo un bosque que crece" Pues que siga creciendo bajo la protección de la Virgen del Pilar.
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