(95) "Mariología Bíblica", oportuna obra del p. Stefano M. Manelli FI

Es una gran alegría anunciar la presentación de una obra largamente esperada, que por fin podrán disfrutar los lectores iberoamericanos, acercándose más reverentemente a los pies de María Santísima, desde la fiesta de su Natividad.
Se trata de la edición de la primera edición en castellano de la Mariología Bíblica, del p. Stefano María Manelli, fundador de los Franciscanos de la Inmaculada.
El p. Stefano ha contribuido a un renacimiento tanto de la vida franciscana -más cercana a los orígenes e inspirada en el espíritu mariano de San Maximiliano Kolbe- como también de la Mariología, profundizada bajo cada aspecto (bíblico, patrístico, litúrgico, dogmático, apologético), a través de la organización de Simposios Mariológicos Internacionales en Italia y en el exterior (como en Inglaterra y Fátima). Ha dado también nueva vida a la corriente mariológica corredencionista actual, produciendo estudios y trabajos científicos centrados en el misterio de la Inmaculada Coredentora.

No son independientes, claro, y toda perspectiva que disocie su abordaje sin tener en cuenta su fundamental unidad, mira la realidad con un solo ojo. Por eso a quienes integramos el Círculo de Formación San Bernardo de Claraval, nos ha parecido importante este año presentar el XVIII Encuentro de Formación Católica de Buenos Aires (que se realizará entre el 19 y 21 de septiembre en San Miguel, Bs.As.) de modo que las diferentes exposiciones puedan arrojar un poco de luz a lo que se nos presenta hoy como un verdadero totalitarismo, en un presunto “orden” que no es sino propagación del gran Desorden porque se lo construye de espaldas a Dios, pisoteando Su ley y Su Palabra. Sabemos, sin embargo, que el Señor no miente al advertirnos que “
Tal vez el editor de infocatolica refunfuñe un poco por este post, pero me perdonará la “travesura", porque yo creo que es de justicia no sólo agradecer, sino también comunicar todo lo posible el gozo por los bienes recibidos; compartir la alegría, y también nuestro corazón, cuando rebosa.


