El profesor Fernando Romero analiza en profundidad los errores del llamado liberalismo conservador

Fernando Romero Moreno es abogado por la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y Profesor Superior Universitario por la Universidad Católica Argentina (UCA). Está dedicado desde hace 30 años a la Educación, tanto en cargos docentes como directivos. Actualmente trabaja en el Colegio Los Caminos (APDES-Pilar). Es autor del libro “La Nueva Derecha-Reflexiones sobre la Revolución Conservadora en la Argentina” (Grupo Unión, Buenos Aires, 2021). Está casado y tiene 4 hijos.
¿Por qué decidió impartir una charla sobre el liberalismo conservador desde la Doctrina Social de la Iglesia y el tradicionalismo político?
Porque en los últimos años se ha vuelto a poner de moda la expresión “liberalismo conservador”, corriente ajena según sus defensores a los grados de liberalismo condenados por los Papas, en especial León XIII, tesis que no comparto. Y también porque otros, aún aceptando que el liberalismo conservador tiene errores, señalan empero la licitud de una articulación del mismo con otras corrientes políticas (por caso, el tradicionalismo) para hacer frente a la izquierda, al progresismo “woke” y al globalismo, dentro de lo que en la Doctrina Social de la Iglesia (DSI) se conoce como la “hipótesis” (ley natural), pero sin renunciar a la “tesis” (ley natural y ley divino-positiva, en el marco de la Unidad Católica). Yo coincido con esta última opción práctica, en el marco de la llamada “Nueva Derecha Conservadora” (como articulación de diversas corrientes en torno a un mínimo de valores compartidos, no como una doctrina), pero sólo cuando tiene como objetivo un fin honesto, que sin ser el bien ideal, sea sí el bien posible.




