León Arsenal: “La conversión católica de Recaredo tuvo importancia capital en la historia de España”
León Arsenal es escritor, divulgador y promotor cultural. Tiene más de 20 libros en su haber y cuenta con media docena de premios literarios de primer nivel en su haber. Ha dirigido revistas literarias y programas radiofónicos sobre literatura. Lleva años organizando eventos culturales de todo tipo y es uno de los fundadores de Día de la Romanidad, así como codirector de las Jornadas Renacentistas de Cogolludo (Guadalajara).
¿Por qué la época del reino visigodo de Hispania es muy poco conocida en
general?
Es poco o nada conocida por el público en general. O más bien, lo poco que ese público conoce es errado, cosa que es aún peor. Muchos, si les preguntan por los visigodos, tienen la vaga noción de un hatajo de bárbaros del norte que se apoderaron por la fuerza de la península, arrebatándosela a los romanos, hasta que a su vez los musulmanes se la arrebataron a ellos tiempo después. Cosa que tiene muy poco que ver con los procesos históricos que de verdad tuvieron lugar.
La época del reino visigodo de Toledo es poco conocida —insisto que a nivel de público, porque los historiadores la han trabajado mucho— porque, en general, la historia de España se ha relegado al olvido o, lo que es peor, a simplificaciones que llegan a la caricatura o a la falsedad. Pero, en realidad, eso no es algo nuevo en España.
Desde el siglo XIX, distintas ideologías han tratado de manejar e instrumentalizar nuestra historia para servir a sus propios intereses y esquemas mentales. Lo que ocurre es que ahora eso se ha convertido, parece, en una de las piezas clave de lo que ahora llamamos guerra cultural.
¿Por qué es preciso conocer esos años que en cierta manera fueron una prolongación y evolución del Imperio romano?
De entrada, por simple cultura general. No se puede andar por la vida manejando cuatro tópicos, a menudo errados —sobre este tema o cualquier otro— y luego encima dárselas de enterado. Conocer un poco de esos dos siglos de régimen gótico que, en efecto, fueron una verdadera tardorromanidad, son claves para entender la evolución que, en último término, llevó a donde estamos ahora.
¿En qué medida esos dos siglos de historia han condicionado lo que hoy es España?
En todo, claro. El momento actual no es más que un hito en un largo proceso de siglos que no se entiende ni se explica sin alguna de sus partes. Por ejemplo, si los visigodos hubieran logrado contener a los francos en la Galia y hubieran seguido allí teniendo su eje, y teniendo a la Península como su «patio trasero», y aquí se hubieran desarrollado pequeños estados del todo independientes, ahora la cosa sería muy distinta. O si hubieran consolidado un gran estado que abarcase buena parte de la Galia y toda la Península. O si hubieran sido capaces de frenar la descomposición centrífuga que llevó en último término a su derrota y conquista por los musulmanes a comienzos del siglo VIII… cualquier variación en esos siglos (como en los anteriores o los posteriores) habría llevado a la larga a una España muy distinta, o incluso a un futuro en el que quizá no existiría esta nación política que conocemos como España.