Esperanza Puente: “Las feministas ocultan el síndrome post-aborto para no reconocer su fracaso”
María Esperanza Puente Moreno, presidenta de la Asociación Voz PostAborto y colaboradora de la Fundación RedMadre, reflexiona sobre el gran drama que supone el síndrome post-aborto y su lucha para ayudar a las mujeres que han abortado.
Háblenos brevemente de su trayectoria en defensa de la vida.
Llevo 20 años Asesorando acogiendo y ayudando a mujeres que se enfrentan a un embarazo inesperado para que sigan adelante con su embarazo.
Llevo 20 años atendiendo y ayudando a hombres y mujeres a sanar el trauma que causa uno o varios abortos provocados y/o espontáneos.
Tengo mi trabajo profesional en la ONCE, pero colaboro con Instituciones nacionales e internacionales que defienden los verdaderos derechos de las mujeres como la información completa y veraz y las opciones que tienen al aborto.
Soy Presidenta de la Asociación Voz Postaborto para visibilizar el dolor que causa el aborto y que tanto interés tienen los abortistas en ocultar.
¿Con qué grupos colabora actualmente?
Colaboro con Instituciones en defensa de la mujer, de la vida, la familia y la educación; Por ejemplo: Fundación REDMADRE, La federación de asociaciones Provida de España, la Asamblea para la defensa de la Vida, la Verdad y la dignidad, (Abarca diferentes tipos de instituciones), CAM internacionales (Centros de Ayuda a la Mujer Embarazada).
Además con diferentes Instituciones, aunque no hay muchas, que atienden el Postaborto.
¿Qué importancia tuvo el precedente de Estados Unidos revocando la sentencia Roe vesus Wade?
Mucha, porque demostró que la lucha por la verdad puede revertir leyes dañinas para la sociedad para las que se legislan. Da esperanzas en las Instituciones Gubernamentales, e incluso en los políticos.
Fue un respiro de esperanza. Esta lucha por la defensa de la vida de todos los seres humanos es ardua y sacrificada, revocar esa sentencia dio aliento a tanta gente que se deja la piel por ayudar de verdad a la mujer.
También en España se ha conseguido grandes avances en cuanto al trauma postaborto y el engaño al ocultar las graves consecuencias que provoca.
Si, se ha conseguido manipular, engañar y abandonar a su suerte a las mujeres para abocarlas a abortar. Aprovechan el silencio al que se condena a la mujer y al hombre después de sufrir el aborto.
Este silencio cómplice con profesionales que han ideologizado su profesión y por lo tanto la ejercen mal dañando la integridad física y psicológica de las mujeres; por ejemplo: psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, y por desgracia cada vez más médicos.
El aborto seguro no existe, pero no salen en los medios de comunicación las mujeres que sufren una mala praxis de aborto en centros privados a los que solo les importa el negocio, no se preocupan de ellas. Si sale mal el aborto, llaman una ambulancia y acaban en un hospital público para que les arreglen el desaguisado. En dicho hospital nunca constará por escrito que ha llegado de un centro de abortos, y si se les muere alguna mujer llaman a una funeraria y esta se encarga de avisar a su familia.
Por desgracia para una sociedad tan nihilista como la que vivimos lo que no sale en prensa y televisión, no existe. La realidad es que existe y es más frecuente de lo que nos imaginamos.
Hable de su Proyecto de la Asociación Voz Postaborto.
Soy Presidenta de la Asociación Voz Postaborto. Es una Institución para ayudar de manera integral a sanar el trauma postaborto y dar visibilidad a las consecuencias que causa. Es una institución con la que las personas que han abortado, puedan identificarse y compartir experiencias sin miedo a ser juzgados y para que poco a poco quienes sean capaces den testimonio público.
¿Por qué es importante que se den a conocer las consecuencias del aborto?
Porque concienciaría a la sociedad de que el aborto no solo afecta al ser humano que se muere, afecta a la mujer y el hombre que participan en la muerte de su hijo y que acaba afectando a su entorno familiar, laboral y en definitiva a la sociedad en general.
Que la violencia que se ejerce para abocar a la mujer a abortar, más el acto violento del aborto, provoca violencia entre hombres y mujeres, entre padres e hijos etc., no parará de aumentar mientras no asumamos que la violencia genera violencia.
El aborto provoca mucha ira en el corazón de la mujer y del hombre y más tarde o más temprano se ejerce contra uno mismo o contra otros.
Muchos ayudan a las mujeres en riesgo de abortar para seguir adelante con sus embarazos; sin embargo cuesta mucho que ayuden a las mujeres que han abortado y lo pasan muy mal.
El postaborto se sigue negando desde todos los ámbitos. Los que defienden el aborto aprovechan el silencio de las mujeres y repiten que son muy pocas las que sufren consecuencias psíquicas, de hecho especifican que son las que tienen fe en alguna religión, nada más lejos de la realidad.
Los Provida están muy ocupados con escasos recursos para ayudar a las mujeres a seguir con sus embarazos, aunque como cada vez hay más mujeres que aceptan la ayuda porque ya tienen uno o varios abortos a sus espaldas, y están haciendo verdaderos esfuerzos para que psicólogos voluntarios ayuden a estos perfiles concretos.
Cada vez hay más mujeres que son capaces de hablar de lo que han sufrido después de abortar, pero aún falta mucha concienciación de cómo afecta a toda la sociedad para recuperar la conciencia, la humanidad y sobre todo el sentido común, para revocar leyes injustas que dañan y no benefician a nadie.
¿Cuál es la manera más eficaz de ayudar a estas mujeres?
Es muy importante escuchar y no juzgar, porque la hipocresía y cinismo social impiden que una mujer se abra y cuente lo que ha vivido.
Hay que exigir a la sociedad psiquiátrica, psicológica, médica que ejerzan sus profesiones sin ideología feminista, porque ellos si son conscientes de la realidad que viven las mujeres y lo ocultan por no ser agredidos en su profesión o simple y llanamente por ideología.
Hay que exigir a los Gobiernos que en las políticas sociales, incluyan ayudas específicas a mujeres ante un embarazo inesperado en riesgo de exclusión social, y que el aborto sea la última opción que se le ofrezca a la mujer, hasta que se pueda derogarla como ha ocurrido en EEUU.
El feminismo mira hacia otro lado y no ayudan a estas mujeres, como usted denuncia. Que diría al respecto.
El feminismo sirve a intereses económicos de alto nivel, que no les importa las problemáticas de la mujer, sino conseguir objetivos, cómo el control de la población mundial, y el control social para la utilización de los seres humanos sin libertad y sin capacidad de revelarse, para formar un nuevo orden mundial.
Las feministas presumen de defender los derechos de las mujeres, pero sobre todo desde los años 60 no han defendido a las mujeres que no quieren abortar, y desde luego no ayudan a las mujeres después de abortar porque entonces tendrían que reconocer que toda su falsa lucha no tiene sentido.
¿Cuál sería la conclusión final de todo lo hablado?
No importa que haya gente capaz de hacer cualquier cosa sin medir las consecuencias para que el mundo sea dependiente y por mucho que piensen que hay seres humanos prescindibles, por mucho que quieran dominar el mundo, se les olvida que el ser humano es impredecible, siempre habrá seres humanos que se revelen y consigan cambiar las cosas para bien, como ha ocurrido a lo largo de toda la historia en todas las civilizaciones hasta nuestros días.
El bien prevalecerá sobre el mal que muchos seres humanos sean capaces de cometer. Mientras tanto seguiremos luchando para defender la vida humana desde la concepción hasta su muerte natural.
Por Javier Navascués
6 comentarios
Pero hay otras que se las traen y es terrorífico escucharlas .
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