Los Cristeros mexicanos, héroes y mártires de la Contrarrevolución
Cristo dijo que el día del juicio final reconocerá al que así lo haya hecho ante los hombres. En cambio no reconocerá al que le haya negado en vida. Nuestra fe y nuestros principios católicos deben estar por encima de todo, incluso de la propia vida. Cuando la masonería y los enemigos de la Iglesia atacan los Derechos de Dios hay que reaccionar con firmeza en Defensa de la Fe.
Así reaccionaron los Cristeros mexicanos. Muchos de ellos llegaron hasta el heroísmo supremo. Tuvieron la gracia de verter su sangre por Cristo. Probablemente la mayoría de ustedes hayan oído hablar de ellos, pero tal vez fuera de México no se conozcan con mucho detalle sus hazañas.
El historiador e ingeniero D. Eduardo Vital Torres, caballero católico, es un gran apasionado de la historia mexicana. En esta ocasión nos explica de forma sencilla el fenómeno de los Cristeros, sus circunstancias históricas y su legado.
¿Quiénes fueron los Cristeros mexicanos?
Fueron los más grandes mexicanos del siglo XX. Fueron los mártires mexicanos que dieron testimonio de la Fe firmísima que nos distingue ante el mundo entero, y que no puede entenderse sin ir a la raíz de nuestra formación nacional: el gran ejemplo y testimonio de Hernán Cortés- Padre Fundador de la Patria Mexicana- nuestros 12 primeros misioneros franciscanos “semilla selecta que nos fue enviada de España” y por supuesto la milagrosa Imagen de Santa María de Guadalupe de México.
Háblenos de las circunstancias históricas y políticas de la época de los Cristeros.
Para poder entender la lucha cristera debemos retroceder hasta el siglo XIX: desde antes, pero especialmente después de la Independencia México cayó en una espiral de violencia y destrucción por causa de las logias masónicas que buscaban por todos los medios destruir nuestros pilares de fundación nacional: el Hispanismo y el Catolicismo. Para destruir nuestra fundación hispánica buscaron enfrentar lo español contra lo indio; para lo cual se usaron las mentiras de la “leyenda negra” y para destruir el catolicismo usaron las ideas de la revolución francesa y las ideas liberales de los USA. En la primera parte obtuvieron mucho éxito aprovechando el que tenían el poder de la prensa y de la educación para propagar sus mentiras. En el segundo punto no tuvieron éxito, pues la sociedad mexicana era extraordinariamente católica. Esa lucha brutal del siglo XIX se intensificó en el siglo XX con las leyes persecutorias de Plutarco Elías Calles.
¿Por qué fue lícito y justificado su levantamiento en defensa de la fe?
Por supuesto que fue lícito, pues se agotaron todos los medios legales a su alcance para lograr una solución pacífica del conflicto. De hecho lo que se pedía era tan moderado y simple como permitir la libertad religiosa. Eso fue todo lo que se pidió. Plutarco Elías Calles en forma despótica planteó la situación: los católicos solo teníamos dos caminos; acudir al congreso o tomar las armas. Se llevaron 2 millones de firmas de católicos pidiendo la modificación de las leyes antirreligiosas. Pero los diputados tiraron esos 2 millones de firmas a la basura diciendo que “esa demanda había sido inspirada por los obispos…”, así que solo dejaban la lucha armada como el único camino posible.
¿Por qué el Papa Pío XI en cierta manera los frenó y después se arrepintió de ello?
Todavía es motivo de un ardiente debate en México entre católicos que estudiamos esa época si era posible o no ganar la guerra. Sin duda la lucha fue una lucha heroica que duró 3 largos años de 1926 a 1929 en el cual se tenía en pie de guerra a más de 20.000 soldados. Sin embargo era materialmente imposible ganar la guerra NO por falta de valor – que eso sobraba- sino porque el GOBIERNO MASÓNICO DE LOS USA APOYABAN A LOS TIRANOS MEXICANOS. El Papa vio claramente esa situación: los templos estaban cerrados, la fe estaba corriendo grave peligro y la lucha no era posible de ser ganada. Dada esa situación Roma determinó que había que llegar a un “arreglo”. Arreglo que como bien dijo el Papa Pío XI se sabía que el gobierno masónico no iba a respetar. Yo estoy seguro que el Papa se arrepintió de frenar a los Cristeros, a los que como dato adicional no se les respetó el indulto y fueron asesinados literalmente como bestias feroces. Murieron más Cristeros en la paz que durante la guerra.
¿Podría poner un ejemplo de martirio especialmente heroico y significativo?
Quiero poner el ejemplo del primer mártir mexicano de la Cristiada: Don José García Farfán. Era un comerciante de 66 años. En el aparador de su tienda había un gran letrero que decía: “¡Viva Cristo Rey! ¡Cristo vive, Cristo reina, Cristo impera! ¡Sólo Dios no muere ni morirá jamás!”; el no arrancarlos fue su delito. El 20 de julio pasaba en su automóvil el Jefe de Operaciones de aquel lugar, General Amaya, acompañado del General Sánchez, quién irritado trató de golpear al anciano, que se defendió; fue conducido preso a la Jefatura de la Guarnición. La gestión de sus familiares no pudo obtener nada a su favor; su abogado defensor fue amenazado de muerte si proseguía su gestión. Muy de madrugada fue sacado, con el pretexto de llevarlo a una cárcel pública; en el camino, simulando un ataque, le dieron muerte. Al fusilarlo, el jefe del pelotón lo provocó: “¡A ver cómo mueren los católicos!"; “Así", repuso el anciano caballero, apretó un crucifijo contra el pecho y gritó: “¡Viva Cristo Rey!” Esa sangre de mártires es y seguirá siendo semilla de cristianos. Y mientras existan mexicanos fieles a la Iglesia sentirán el amor y veneración a esos santos héroes.
¿Cuántos mártires dieron a la Iglesia?
Fueron miles. Por desgracia durante décadas no se pudieron llevar las causas de beatificación por el temor de ser atacados por el gobierno nuevamente. Fue hasta la década de los años 90 en el siglo XX en que se volvió a regularizar la relación entre el Vaticano y el estado mexicano. Algunos de ellos han sido canonizados, pero creo que bajo la capa de “prudencia” en muchos casos se actúa con negligencia, pues tendríamos que hablar más sobre nuestros héroes. En ese aspecto creo que nos parecemos mucho al caso de nuestros hermanos españoles con sus mártires de la Cruzada de 1936 a 1939.
Javier Navascués Pérez
15 comentarios
Yo vivo en México. Actualmente, existe una distancia abisal entre la heroicidad católica de aquellos hombres y el paganismo nacionalizado de la era presente.
Como prueba, sólo basta una mirada hacia las estadísticas de homicidios, abortos, robos, violencia, narcomenudeo, pobreza intelectual, legalización de la fornicación homosexual y la reciente elección de un nuevo gobierno de corte netamente marxista. Signos inequívocos (manifestaciones externas) de una población espiritualmente alejadísima de la "ciudad de Dios".
Los cristeros tuvieron su antaño. Hoy, la política, la cultura, la vida intelectual, la vida familiar y social del mexicano está inclinada hacia el ateísmo materialista.
Los pocos católicos --bien formados intelectualmente y comprometidos con la fe-- sufren por escacez y dispersión. Son pocos y disgregados. Bajo obispos cobardones, hedonistas y/o teólogos de la liberación.
Cuanto más estudio la Cristiada más miserable me parece aquella situación y más repugnante aquella Constitución y aquella Ley inicuas y más razones veo para el Alzamiento Cristero, que, repito, fue exclusivamente religioso porque no había ni razones políticas, ni sociales, ni sindicales, ni de ninguna otra clase. La mayoría de los cristeros eran pobres pero no fue la pobreza la que les hizo combatir, combatieron por defender su Fe y en ello se implicaron todas las clases sociales y todas las razas: pobres, ricos, indios, mestizos y blancos.
El Altar y el Trono en esos ambos casos, y aun mas en el tema de España, no pueden separarse.
Ademas estamos hablando de 2 visiones del mundo, por un lado, las monarquías Católicas, y por otro gobiernos liberales.
Es cierto que la Monrquia Francesa, NO era la Española y que la Monarquia Española, necesitaba volver a su sendero tradicional, que tanto la caracterizo, porque estaba derivando en cierta forma, en un absolutismo, pero bueno, eran cuestiones que se podrian haber corregido, con sus aciertos y errores, mas allá de los pecados o no del monarca de turno, las leyes estaban sometidas a la ley divina y la ley natural. Y era visible el principio de autoridad.
Con el regimen liberal (incluyo a los comunistas de España, puesto que el fondo es el mismo), ¿que vemos? Desprecio de la ley natural, y ni hablar de la divina, destrucción del principio de autoridad.
Los Vandeanos, en un primer momento, aunque no estaban contentos con el cambio de gobierno, no se levantaron en armas, hasta te diría que estaban dispuestos a aceptarlos de ser necesario. Los Vandeanos se levantan cuando se ven perseguidos en la parte religiosa. Y NO se levanta la nobleza en primer lugar, es la gente mas humilde la que se levanta y va a buscar a la nobleza, por una cuestión lógica, eran sus autoridades naturales, y tenían formación militar.
Y el tema de los Carlistas, bueno, la Monarquía Hispánica, NO puede separarse de la fe Católica. El carlismo excede a toda condición social, y el fondo politico, si bien es importante, por si solo no hubiera durado.
Cuando surge el Carlismo, NO surge solamente como una cuestión dinástica, entre los partidarios de Carlos, y los de Isabel. Eran justamente la visión de 2 Españas. Por un lado, La España Católica con Don Carlos y por otro, una deformación de España, liberal, plagada de masones, y con una Isabel, atada de manos.
Respeto su opinión, pero me parece que en España y Francia, "El Altar y el Trono", tienen que verse como parte un todo, y no como algo accesorio.
Hay que agregar que la lucha sigue, el demonio no da cuartel ni sus servidores. Lo vemos todos los días usando cualquier medio. No hay que bajar la guardia hay que luchar todos los días y con el ejemplo a los demás sobretodo.
Qué viva Cristo Rey!
Un dato perturbador, en la antigua zona cristera del centro y occidente del país (Jalisco, Michoacán, Guanajuato) está sufriendo en la actualidad un duro desabasto de gasolina, afectando la produccion alimentaria de la región, a un mes de entrado el nuevo gobierno.
Los izquierdistas aseguran que es para controlar el robo de hidrocarburos, pero el Wall Street Journal los desmiente con estadísticas, simplemente se dejaron de importar los insumos necesarios para la producción del vital combustible.
No es claro si se trata de una maniobra de agresión o solo es la habitual incapacidad de los marxistas para administrar, pero el hecho es que "casualmente" es dicha zona la afectada. ¿Es el reinicio de la guerra?
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