Sobre la desmentida de la Oficina de Prensa
***
“Por el momento, no existen propuestas institucionales referentes a una modificación de los libros litúrgicos en uso”, fue la afirmación del Padre Ciro Benedettini, vicedirector de la Oficina de la Prensa de la Santa Sede, que pareció dejar atrás la importante noticia publicada por Andrea Tornielli el pasado sábado, una noticia que suscitó tanta alegría en muchos católicos como desconcierto en otros.
Habría que aclarar, basándonos en la experiencia, que este tipo de “desmentidas de rutina” lanzadas por la Oficina de Prensa no implican, en la mayoría de los casos, una inexistencia de los asuntos que se desmienten. Basta recordar que el tan mencionado “indulto para celebrar la Misa tridentina” (que luego tomaría el nombre y la forma de “Motu Proprio Summorum Pontificum”) fue desmentido en varias ocasiones por la Oficina de Prensa, incluso semanas antes de su publicación. Se puede pensar también en el tan rumoreado nombramiento del Cardenal Cañizares como Prefecto de la Congregación para el Culto Divino, que fue negado una y otra vez, incluso por el mismo involucrado. Finalmente, se puede recordar el reciente asunto de la tumba de San Pablo Apóstol: el Cardenal Arcipreste de la Basílica de San Pablo negó la existencia de eventuales investigaciones del sarcófago tan sólo unos días antes de que el mismo Santo Padre anunciara sus resultados.
Por otro lado, a favor de la veracidad de la noticia publicada por Tornielli, tenemos un elemento clave: el pensamiento de nuestro actual Sumo Pontífice. Quien lo haya leído, quien lo haya escuchado, sabe cuán importante ha sido y es para él la Liturgia. Esto se vislumbra en el conjunto de su obra, en la gran variedad de sus intervenciones, pero si quisiéramos elegir una frase representativa, podríamos recordar ésta: “Estoy convencido de que la crisis que estamos viviendo hoy en la Iglesia se debe en gran medida a la desintegración de la liturgia”. Y, al respecto, podemos pensar que dos de los periodistas que más lo han conocido y que han llegado a escribir libros con él, Vittorio Messori y Peter Seewald, pronosticaron una intervención en el tema del nuevo Papa cuando la Providencia quiso elevar a la Sede de Pedro al anciano cardenal alemán.
Por último, hay que aclarar que sería engañoso pensar que podemos esperar del Papa Benedicto fortísimas intervenciones que, sin previa consulta y en tiempos apresurados, obligaran a todos con la más estricta fuerza de ley. Quien erróneamente pronosticaba esto al comienzo del pontificado benedictino ciertamente estaba equivocado pero por desconocer la personalidad y el estilo de Joseph Ratzinger, un estilo que con tanta claridad describen quienes han trabajado cerca de él en la Congregación para la Doctrina de la Fe. Su estilo consiste en consultar, profundizar, debatir, buscar el consenso, realizar una síntesis de las diversas opiniones, sin alejarse nunca de lo que considera necesario para la vida de la Iglesia. Su estilo es también, al contrario de lo que manifestaban las injuriosas caricaturas del “Panzer cardinal”, la paciencia del amor que con tanta precisión describe don Nicola Bux en su último libro.
En conclusión, teniendo en cuenta tanto el pensamiento de Joseph Ratzinger-Benedicto XVI y su manera de actuar así como también el talante y el plan de trabajo del Cardenal Cañizares, su “ministro de Liturgia”, podemos creer que efectivamente, en el seno de la Congregación de Culto, se está realizando un sereno pero eficiente trabajo que aspira, en principio, a recuperar parte de lo que se ha perdido en los turbulentos años post-conciliares en materia litúrgica según la “hermenéutica de la continuidad” que promueve Benedicto XVI. Esto se ve confirmado, además, por algunas voces autorizadas que, desde Roma, han confirmado hace algún tiempo a esta Buhardilla que el dicasterio vaticano de Liturgia está trabajando en este sentido por decisión del Santo Padre aunque, ciertamente, también se admite que esto requerirá tiempo.
Finalmente, es curioso el hecho de que, precisamente cuando la Sala de Prensa lo niega, Il Giornale (el periódico donde escribe Tornielli) vuelva a insistir en el tema presentando las 5 novedades, contenidas en el documento entregado al Papa, e informando que ahora han pasado al análisis de obispos y cardenales de la Congregación para el Culto Divino. De este modo, queda confirmado tanto el trabajo del dicasterio como la necesidad de tiempo en sus diversas etapas. He aquí nuestra traducción de los 5 puntos que ofrece hoy el diario italiano:
“A. Se intenta revisar la parte introductoria del Misal poniendo más frenos a la creatividad, y subrayando el sentido de lo sagrado y la importancia de la adoración.
B. Se prevé, en el futuro, la re-publicación de todos los misales bilingües, con el texto latino en el frente.
C. Se quiere contener la práctica, ya difundidísima, de dar la Comunión en la mano, recordando que se trata de una concesión extraordinaria pero que el modo normal de recibir la Hostia es en la boca.
D. Se pide que, en las solemnidades, se vuelva a celebrar en latín, también según el nuevo rito.
E. Se subraya la importancia para el celebrante de dirigirse hacia Oriente, al menos durante la consagración eucarística, como ocurría en la praxis anterior a la reforma, cuando tanto fieles como sacerdote miraban hacia la cruz y el sacerdote daba la espalda a la asamblea.”
***
17 comentarios
Si la Sagrada Liturgia desune,es como si la sal se desvirtúa ¿con que se la salará?.
En cuanto a la comunión en la mano, pienso que, o se mantiene el indulto o se deroga, pero esto de "contener" la práctica me suena a letra muerta. Mientras que el indulto esté en vigor, la gente seguirá comulgando en la mano.
Un abrazo a todos
Totalmente de acuerdo,solo colaboramos desde la obediencia y la humildad.
Mantengo lo que dije ayer en mis dos comentarios y que ahora confirma este post de La Buhardilla, y es que " podemos creer que efectivamente, en el seno de la Congregación de Culto, se está realizando un sereno pero eficiente trabajo."
Yo lo decía con otras palabras deduciéndolo de la expresión del comunicado. No hace falta ser adivino para llegar a esa conclusión, simplemente abrir los ojos.
Si vas a messainlatino.it, ve al post " La riforma della riforma: si fa o non si fa ? ", del lunes ( lunedì 24 agosto ). Hace un rato tenía 30 comentarios, pero han borrado uno. Si es al que yo aludía, y creo que sí, tendrán que borrar otro parecido que aún sigue allí.
Pero sinceramente no creo que la Liturgia sea la causa de la falta de FE hacia lo divino como algunos pretenden. Sino que ésta, -la Liturgia- es la "consecuencia" de la falta de FE de los cristianos.
Dicho sea: Hoy día la gran mayoría de los critianos tienen un muy relativo y discrecional sentido; amén de los Santos Mandamientos; del santo temor de Dios.
Luego el problema tiene otro sentido y a mi corto juicio es: que el Papa en primer lugar, sepa imprimir a sus "príncipes allegados": Que el Cielo y el Infierno existe, para premiar o castigar, tanto a él como Jefe de la Iglesia. Como para el bosquimano en su Selva escondido.
La humildad y obediencia son, efectivamente, el modo correcto de vivir nuestra pertenencia a la Iglesia. Nada impide que podamos analizar este tema, debatir sobre su oportunidad y hasta pensar cómo podría realizarse en la práctica pero la última palabra es, por supuesto, de Su Santidad y es a esa palabra a la que debemos someternos todos los católicos. Por lo tanto, absolutamente de acuerdo estamos todos en que la obediencia y la humildad son las actitudes que debemos tratar de vivir en el seno de la Iglesia.
Por último, la Real Academia Española admite tanto el uso de "desmentido" como el de "desmentida".
Para quien le interese, reproduzco aquí las palabras del Señor Cardenal: "No con la idea de cambiar los ritos o las formas de la liturgia salvo en aquellos puntos en donde sea necesario, manteniendo la lógica de la continuidad de la liturgia, pero, sobre todo, para hacer que las introducciones ofrezcan los necesarios y adecuados aspectos doctrinales que ayuden a asimilar lo que sucede en las celebraciones litúrgicas".
Los comentarios están cerrados para esta publicación.