Aborto: Yo también fui cómplice (Miguel Ángel Ruano Contreras)
Título: Aborto: Yo también fui cómplice
Autor: Miguel Ángel Ruano Contreras (Winston Smith)
Editorial: Bubok.com
Páginas: 183
Precio aprox.: 9’65€ ; descarga gratuita
ISBN: 978-84-936787-6-0
Año edición: 2012
Lo puedes adquirir en Bubok
Hay muchos tipos de conversionesporque las posibilidades que los seres humanos tenemos de existir son, también, múltiples y porque Dios toca el corazón de sus hijos según sea cada cual y como convenga en cada ocasión.
El mundo del aborto es sórdido. Es conocido por todo el que no quiera estar ciego y sordo ante lo que pasa que muchos intereses económicos se mueven alrededor del mismo y que, en general, ha habido una acomodación social a lo que pasa con el mismo. Podríamos decir que se ve como “normal y aceptado” que una mujer acuda a un centro (privado o público) a que mediante las más diversas técnicas (de las que se habla en este libro) el hijo que debía venir al mundo deje de existir y, simplemente, muera antes de ver la luz del día.
Por eso siempre es bueno caerse del caballo (al igual que le pasara a Saulo antes de ser Pablo y mucho antes de ser san Pablo) y darse cuenta del error en el que se estaba al respecto del aborto. Algo así le pasó a Miguel Ángel Ruano Contreras, más conocido en las redes sociales como Winston Smith. Él no había dejado del todo su fe pero, a lo mejor, se había acostumbrado a lo que no debería ser normal lo fuera que es lo que, en general, pasa si hablamos sobre el aborto.
Es, éste, un libro curioso porque intercala, en la escritura del mismo, intervenciones del autor y de otras personas en conversaciones que se han ido produciendo a lo largo del tiempo y que han tenido cabida en foros sociales o, lo que es lo mismo, en Internet. En las mismas, Miguel Ángel Ruano Contrerasmanifiesta una notable preocupación por el tema del aborto y las personas que le contradicen… como es de esperar lo contrario pero, esto también es verdad, con mucho desnortamiento.
En el mismo título dice el autor que se siente “cómplice” del aborto porque en el Prólogo dice, por ejemplo, que “He elaborado este libro a partir de mi propio recorrido personal en relación el aborto, desde la ingenua, arrogante y manipulada ignorancia permisiva hasta que el descubrimiento de su triste y terrible realidad me hizo comprender que la Iglesia siempre tuvo razón” (p. 6)
Por eso, a lo largo del texto puede apreciarse con bastante claridad que el arrepentimiento ha sido de los llamados eficaces porque de permitir, en lo que puede entenderse esto al menos por omisión de acción en su contra, que el aborto siguiera su camino, a lo contrario (con actos frente a clínicas abortistas como, en especial, puede verse en el Anexo I de título “Testimonios frente al abortorio”) supone, en efecto, un notable cambio de corazón (que ya no es de piedra sino de carne como Dios quiere que sea).