(Efe) El párroco de Ribaforada avisó el martes, pasadas las once y media de la noche, de que la cruz de la iglesia había sido derribada y destrozada.
Tras ese aviso, las investigaciones llevaron de nuevo al hombre detenido la pasada semana, que reside en Ribaforada, donde ha sido detenido este miércoles.
Este hombre confesó la pasada semana que tras sus vacaciones en Marruecos, se había convertido en un radical en la defensa del yihadismo.
El detenido se encuentra en los calabozos a la espera de pasar a disposición judicial en Tudela acusado de quebrantar la orden judicial por la que quedó en libertad el fin de semana de no acercarse a menos de diez metros de un lugar de culto, así como de ocasionar daños al patrimonio histórico.