(Aci) Asimismo el prelado destacó el compromiso de la Iglesia Católica en la formación de estos principios, ya que “tiene ese deber muy grande y muy urgente en la familia, en el colegio, en la universidad, de enseñarles a esos hijos suyos cuál es el contenido y en qué consiste ser católico”.
El Cardenal, señala la nota del Arzobispado de Lima, también animó a promover la adoración eucarística, patrimonio de todos los católicos en donde el mismo Señor Jesús está realmente presente, que con los demás sacramentos “son momentos concretos en que la presencia real del mismo Cristo subsiste plenamente en la Iglesia Católica”.
“El desafío es que tú y yo demos fe con nuestras obras y palabras que realmente creemos en esa Eucaristía y en el Catecismo”, precisó. “Por eso, mi llamado a padres, maestros, sacerdotes, religiosas, religiosos, profesores de religión, a enseñar la fe católica, porque a veces sorprende cómo una inmensidad de católicos esconde por temor su fe en el ejercicio de su trabajo, de su deporte y de su vida en general”, exhortó.
Compromiso de los políticos ante Dios
El Arzobispo también se refirió a la reciente juramentación de los nuevos congresistas y los ministros de estado del gobierno de Ollanta Humala que asumió la presidencia del Perú el 28 de julio. Al jurar ante Dios, indicó, deben “recordar a lo largo de toda su vida y de todo su compromiso en el trabajo político, económico, cultural, que se han comprometido poniendo como garantía su amor a Dios y como garantía el contenido de los Santos Evangelios”.
Comentó que el pueblo pone toda su confianza en quienes asumen estos grandes cargos poniendo a Dios como testigo de lo que se afirma y como garantía de su propia verdad, comprometiendo en su juramento el nombre del Señor. “No solamente es la ley que les cae encima y los juzga, sino que es todo un país que pone una responsabilidad en sus manos y por eso evocan la figura de Dios para que toda su vida y todo su compromiso tenga como garantía al mismo Dios”, añadió.
Finalmente el Cardenal Cipriani expresó su deseo de que “este inicio de un nuevo gobierno sea un inicio de paz, de bienestar para todo el país, marcando las unidades y no las contradicciones”.