(Efe/InfoCatólica) Los miembros de la iglesia de Shouwang, que tiene cerca de 1.000 seguidores, se encontraban en una plaza de una zona comercial de Pekín, en la que había una fuerte presencia policial como cada domingo desde el pasado 10 de abril, cuando fueron detenidos allí 169 feligreses, informó el diario independiente "South China Morning Post".
Las autoridades chinas llevan semanas evitando que esta comunidad eclesial oficie servicios religiosos en público, con 169 personas arrestadas el pasado 10 de abril, 50 detenidos la semana siguiente, y más de 30 los dos últimos domingos.
Algunos de los cristianos detenidos en ocasiones anteriores señalaron que la policía les permitió rezar y cantar mientras estaban arrestados, pero también les presionó para que firmaran declaraciones en las que prometían no volver a celebrar un culto religioso en la calle.