El Vaticano nunca ordenó a los obispos de Irlanda violar la ley para encubrir a pederastas. Contrariamente a lo publicado en medios de comunicación de todo el mundo en las últimas horas. Según esa información en una carta de 1997, escrita por el nuncio en Dublín Luciano Sotero, la Sede Apostólica habría pedido a los prelados irlandeses no denunciar casos de pederastia a la policía y a las autoridades judiciales. Una interpretación deformada de la realidad, según aseguró hoy el P. Federico Lombardi, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Porque el asunto es más complicado. Lombardi agregó la misiva fue leída por la prensa en forma tendenciosa. En primera porque originalmente se trató de un documento que precisaba las indicaciones de otro texto de estudio redactado en el seno de la Conferencia Episcopal Irlandesa. El objetivo de fondo era evitar que los sacerdotes acusados de estos delitos tuvieran motivos para presentar recursos a juicios canónicos en su contra y así salvarse de ser castigados por meros tecnicismos.
Además, la misiva nunca fue ni una orden generalizada ni pidió violar las leyes del país en cuestión, como algunos pretendieron hacer creer. A continuación compartimos con los seguidores de este blog el comentario de Lombardi sobre el caso, para abonar claridad y evitar la confusión.
A PROPOSITO DE LA CARTA DEL NUNCIO SOTERO A LOS OBISPOS IRLANDESES
Precisaciones del P. Federico Lombardi / 19 de enero de 2011
En el curso de un programa televisivo en Irlanda se hizo referencia a una carta escrita por el entonces nuncio en Irlanda, Luciano Sotero, a los miembros de la conferencia episcopal en 1997. Esa fue presentada en modo tendencioso por algunos medios de comunicación como prueba de una indicación, de parte vaticana, de cobertura de casos de abuso sexual contra menores.
La carta -escrita en base a indicaciones de la Congregación para el Clero- se refiere a un documento específico de estudio de un comité de obispos irlandeses y pone de relievo los aspectos problemáticos, indicando la necesidad de una profundización que tuviera en cuenta también situaciones análogas en otros países y que fuera conducido en diálogo y colaboración con las conferencias episcopales de los países involucrados.
Es necesario, ante todo, hacer notar que la carta no dice en modo alguno que no deban ser respetadas las leyes en vigor en el país.
Además la carta insiste justamente en el hecho que es importante que la legislación canónica sea siempre respetada, precisamente para evitar que los culpables tengan motivo fundados para un recurso y obteniendo, por lo tanto, el resultado contrario al deseado.
Es necesario finalmente recordar que la carta fue escrita en un tiempo precedente a las normas de 2001 y a aquella unificación de las competencias en la materia bajo la jurisdicción de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que ha ciertamente ayudado a la claridad de los ordenamientos y a la eficacia de los procesos.
Serafines susurran.- Que con motivo del 20 aniversario de la publicación del Catecismo de la Iglesia Católico, que se cumple en 2012, el Papa Benedicto XVI -uno de sus principales artífices cuando era prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF)- decidió establecer un comité vaticano que coordine las actividades para una solemne celebración.
Con bastante antelación el grupo se reunió por primera vez en Roma el martes 11 de enero. El encuentro fue presidido por el sucesor de Ratzinger en la CDF, el cardenal William Levada y el secretario de ese dicasterio, el jesuita español Luis Ladaria.
Forman parte del organismo los cardenales Francis Arinze, Marc Oullet, Ivan Días, Zenon Grocholewski, Mauro Piacenza, Paul Ricard así como los obispos Rino Fisichella y Michael Meier. Con ellos trabajará el arzobispo de San Cristóbal en Venezuela, Mario del Valle Moronta Rodríguez, también miembro estable de la Doctrina de la Fe.