(Juan Cadarso–La Razón/InfoCatólica) Comienza en Madrid un nuevo modelo de evangelizacion. El pasado jueves 6 de enero fueron enviadas por el cardenal arzobispo de la diócesis, Antonio María Rouco Varela, las primeras diez Comunidades en Misión –communitates in missionem– de España, a siete parroquias de Madrid.
Tras el rezo de vísperas en la parroquia de Nuestra Señora del Tránsito, el cardenal impuso las manos a los miembros de las comunidades misioneras y les entregó la cruz de la misión. “Se rememora hoy la experiencia de la Iglesia en sus orígenes, que enviaba a algunos de sus hijos no sólo a confirmar su fe sino a a anunciar el Evangelio a quien no lo conocía”, comentó el cardenal Rouco durante el envío.
Las comunidades en misión pertenecen al Camino Neocatecumenal y surgen de la necesidad de revitalizar las parroquias de las zonas más difíciles y secularizadas. Cada una está formada por unas 30 o 60 personas que han terminado las etapas del neocatecumenado. Ponen en práctica el modelo de nueva evangelización predicado por el Papa Juan Pablo II y de cuya necesidad en nuestros días sigue hablando el Papa Benedicto XVI, las comunidades en misión parten desde sus parroquias de origen, con el permiso de los párrocos, para ayudar en lugares de las mismas diócesis en las que apenas hay católicos. Barrios de nueva construcción o zonas marginales, donde la mayoría de familias están desestructuradas y donde el número de inmigrantes es muy alto.
Roma y Madrid, pioneras
La primera vez que se puso en marcha este nuevo carisma evangelizador fue en la ciudad de Roma. Hace dos años, el Papa envió en esa diócesis a 14 comunidades en la basílica de San Pedro. El cardenal vicario para la Diócesis de Roma, Agostino Vallini, durante una convivencia con estas comunidades, quedó sorprendido de la alegría que manifestaban en sus testimonios.
Las Comunidades en Misión se ponen en manos de los párrocos para todo lo que necesiten, como por ejemplo dar catequesis de comunión, prestar servicio en Cáritas o predicar el Evangelio por las casas. Según informa Álvaro de Juana, encargado de medios de comunicación del Camino Neocatecumenal, en Roma hubo párrocos que pidieron que estas comunidades asistieran a misa todos los días aunque tuvieran que desplazarse muchos kilometros.
Madrid y Roma son las pioneras de este nuevo modelo de evangelización en comunidad, pero se espera que en un futuro surjan Comunidades en Misión en otros países en donde está presente el Camino Neocatecumenal. Los iniciadores de este itinerario de redescubrimiento del bautismo, Kiko Argüello y Carmen Hernández, pensaron que la Iglesia en sus principios era conocida sobretodo a través de comunidades concretas que daban el signo del amor y la unidad.
Margarita Luque, miembro de una de estas comunidades, comenta a La Razón que “cuando lo anunciaron en nuestra parroquia, no me lo podía creeer, me entró un poco de miedo, porque salir en misión significa salir de la comodidad para ayudar al prójimo. Pero la Palabra dice que demos gratis lo que gratis hemos recibido”.