(InfoCatólica) El milagro aprobado para la canonización de la Madre Cándida se debe a la curación de la hermana jesuitina María del Carmen del Val, quien sufrió una grave enfermedad cerebral denominada “leucoencefalopatía multifocal”, que le mantuvo en coma durante 12 días.
Tras invocar a la Madre Cándida y cuando los médicos habían descartado cualquier cura, la enferma se recuperó milagrosamente. Los médicos confirmaron su plena recuperación y la total ausencia de incapacidad neurológica y psíquica.
En 2008, la Junta Médica de la Congregación para las Causas de los Santos reconoció por unanimidad que la resolución tan rápida del coma y la curación completa y duradera no son científicamente explicables y un año después los teólogos consultores dieron su voto positivo y la Congregación para las Causas de los Santos confirmó unánimemente el carácter milagroso de la curación de la Hermana Carmen del Val y su atribución a la intercesión de la Madre Cándida.
Comprometida con la educación de la mujer dentro del Evangelio
Juana Josefa Cipitria Barriola nace en Andoain el 31 de Mayo de 1.845 en una familia humilde. Siendo aún joven, deja su tierra para ir a trabajar a Castilla con el fin de colaborar en la economía familiar
El 8 de Diciembre de 1.871 funda en Salamanca la Congregación de las Hijas de Jesús con el fin de dar respuesta a “la exclusión de la mujer y de las clases económicamente débiles de los ámbitos de la enseñanza”
En pocos años, lo que comenzó en Salamanca se extiende por toda España y posteriormente da el salto a otros países, haciendo realidad su sueño: “Al fin del mundi iría yo en busca de almas”.
La Madre Cándida muere el 9 de Agosto de 1.912 en Salamanca. Sin embargo, a día de hoy las jesuitinas están presentes en todo el mundo y mantienen vivo su espíritu, siendo fieles a la misión de educar en un clima evangélico.