(Efe) Al menos cinco de ellos son norteafricanos, al parecer argelinos, lo que sirvió para que un diario sensacionalista de este país hablara en portada y grandes titulares de “complot islámico para matar al Papa”.
La Policía, que se ha negado a confirmar las informaciones según los cuales los barrenderos estaban bromeando en la cantina, justificó las detenciones señalando que se vio obligada a investigar lo que parecía una amenaza real.
Agentes armados detuvieron a cinco de los hombres en los locales de la empresa donde trabajaban mientras se disponían a cumplir su turno laboral mientras que el sexto lo fue después.
La Policía registró cuidadosamente ocho domicilios en el norte y el este de Londres así como dos lugares de trabajo sin encontrar armas ni material sospechoso alguno.
Scotland Yard publicó posteriormente un comunicado de prensa según el cual no se ha modificado el itinerario del Papa ni tampoco el nivel de “amenaza”, que es actualmente el de “severo”, lo cual significa que un ataque terrorista es “altamente probable”.