(BBC/InfoCatólica) Desde que en 2003 Gene Robinson se convirtió en el primer obispo abiertamente gay de EE.UU., la Comunión Anglicana –la afiliación mundial de Iglesias anglicanas– se ha visto abocada a la ruptura.
Junto a Mary Glasspool, este sábado también fue ordenada como obispo Diane Jardine Bruce. Ambas fueron designadas el pasado diciembre como las primeras obispos mujeres de la diócesis de Los Ángeles, que cuenta con 114 años de historia.
Desaire
La ordenación de Mary Glasspool ha sido interpretada como un desaire de la liberal Iglesia Episcopal de EE.UU. a otras Iglesias anglicanas en todo el mundo.
El arzobispo de Canterbury pidió a la Iglesia Episcopal que no llevara a cabo la ordenación, advirtiendo que ahondaría las diferencias con los tradicionalistas anglicanos, que consideran la homosexualidad activa como un pecado.
Es probable que la ordenación de Glasspool acelere el alejamiento de la Iglesia Episcopal y aumente la tensión entre anglicanos en otras partes.
En un principio la Iglesia Episcopal aceptó suspender la ordenación de obispos abiertamente homosexuales, aunque el julio de este año revocó esa decisión.