(Agencias/InfoCatólica) Los medios de comunicación han subrayado que durante la audiencia el Papa haya utilizado públicamente la frase "abusos abusos por parte del clero", ya que en el último mes desde que comenzó la nueva ola de acusaciones infundadas de encubrimiento, el Papa había usado otros términos como que la Iglesia está "herida por nuestros pecados" o que se requiere "penitencia".
El Papa ha dicho que quiso empezar precisamente su peregrinación con un momento de oración en silencio ante la gruta del Apóstol en Rabat. A este respecto ha señalado que los fieles malteses han dado las gracias a Dios por los misteriosos designios de su Providencia.
"La historia de Malta está marcada por la fe católica –ha afirmado el Santo Padre–. De hecho, esta nación es como una gran familia que se ha construido sobre la fe y una visión cristiana de la vida para encontrar respuestas a las preguntas relativas al respeto de la vida y el matrimonio". "Las familias y las parroquias de Malta han sido capaces de amar a Dios y a la Iglesia”. El Papa ha afirmado que hizo un llamamiento “a no tener miedo de las tempestades de la vida, ni tampoco los naufragios, porque el diseño del amor de Dios es más grande que las tempestades y los naufragios".
El Papa invitó asimismo a Malta que continúe manteniendo su "no" al aborto y al divorcio, testimoniando ser una “comunidad cristiana” ferviente y sólida, que después de 2 mil años continúa siendo fiel al Evangelio y se esfuerza en conjugarlo con las complejas cuestiones del mundo contemporáneo.
"Es cristiana la noble vocación de estas islas. Y la celebre cruz de Malta es un signo de amor y reconciliación –ha manifestado el Pontífice–.Y esta vocación debería ser también la de todas las personas que siguen el mensaje de Cristo. Malta es una sociedad cosmopolita abierta al mundo y siempre ha sido misionera. Situada en el corazón del Mediterráneo, este país puede convertirse en un puente entre culturas y religiones como era ya en tiempos de san Pablo".
El Pontífice aludió asimismo a su encuentro con las víctimas de los abusos, y ha dicho que rezó con ellas "con conmoción" y que les dio seguridades sobre las "medidas" de la Iglesia para que nunca más se produzcan casos similares.
Benedicto XVI saludando en italiano se ha dirigido de manera especial a lo numerosos párrocos y sacerdotes de su diócesis que han participado en la audiencia: "Queridos sacerdotes romanos, os doy las gracias por vuestra presencia, señal de afecto y cercanía espiritual. Aprovecho esta oportunidad para expresar mi vivo reconocimiento a vosotros y a los sacerdotes que en todo el mundo se dedican con celo apostólico al servicio del pueblo de Dios, testimoniando la caridad de Cristo. Con el ejemplo de san Juan María Vianney sed pastores pacientes y solícitos del bien de las almas".