(AnálisisDigital/InfoCatólica) El prelado explicó que el proyecto ideológico que lleva a cabo el Gobierno, con su presidente José Luís Rodríguez Zapatero a la cabeza, es la transformación de la sociedad de acuerdo con la ideología y esquemas desarrollados bajo el patrocinio de las Naciones Unidas y de sus agencias especialistas, que cristalizó en la Conferencia de Pekín, hace quince años.
Monseñor Reig detalló que en esa Conferencia, cuyos contenidos fueron denunciados por los representantes del Vaticano que estuvieron presentes, se adoptaron una serie de acuerdos propuestos por el feminismo más radical y que se condensan en la “ideología de género”. Aunque aún es bastante desconocida por el conjunto de la sociedad, esa ideología la ha hecho visible el Gobierno laicista de Zapatero con sus leyes de ingeniería social que son el núcleo de su proyecto adoctrinador de la sociedad.
El obispo de Alcalá de Henares enumeró y comentó una por una las líneas y acuerdos de ese proyecto: son las referidas a la violencia de género, la de reproducción asistida, la del “matrimonio” homosexual, la del divorcio-express que equivale al repudio, la de bioética, la del aborto y la que ya se prepara de reforma de libertad religiosa que será, en buena medida, la culminación del proyecto. Nada de ello ha sido improvisado, dijo monseñor Reig Pla, sino metódicamente aplicado aun a costa de retorcer la propia Constitución o las sentencias del Tribunal Constitucional, como ha ocurrido con la aprobación de la ley reciente que permite el aborto libre.
Ingeniería social, corrupción y laicismo
A propósito de la “salud sexual”, contenida en la ley del aborto, monseñor Reig Plá subrayó que su objetivo es introducir todo el sistema anticonceptivo en el ámbito de la educación, de manera que desde la enseñanza primaria, los niños sean inducidos a utilizar el sexo con un propósito que puede asimilarse a la corrupción de menores. Así, a los niños se les enseñará que no hay diferencia sexual entre ellos, que pueden emparejarse según su voluntad e incluso elegir su sexo en la medida que se niega la diferencia para dar primacía a la igualdad.
Además, se intenta corromper también el sistema sanitario ya que la ley de Salud Sexual prescribe la enseñanza de la practica del aborto en los estudios de Medicina. Todo esto supone, a juicio de Reig Plá, un golpe a la línea de flotación de la sociedad española con el envoltorio de una “revolución cultural” que implica un cambio de terminología, ya visible en el lenguaje “políticamente correcto”.
En este contexto, constató el presidente de la Subcomisión de Familia y Vida de la CEE, el enemigo a abatir por el laicismo y la ideología de género es la Iglesia Católica, única entidad que está dando la batalla mundialmente en favor de la vida, la familia y la dignidad de la persona, consideradas como absolutos morales.
Respuestas individuales y de asociaciones
Las preguntas de los asistentes se centraron en el ¿qué podemos hacer? La respuesta, dijo monseñor Reig Pla, ya la está dando buena parte de la sociedad civil cuya movilización en defensa de la vida y de los valores morales empieza a dar sus resultados. La respuesta es muy importante, porque el proyecto del Gobierno de Zapatero forma parte de un proyecto global patrocinado por la ONU y que en España ha sido especialmente cuidado para que sirva de modelo a los países hispano-americanos.
Puso como ejemplo el que por primera vez, por ejemplo, no son solamente los católicos de a pié los que se ocupan de dar testimonio públicamente de sus convicciones morales, sino también las asociaciones científicas, jurídicas e intelectuales. Los manifiestos en defensa de la vida, hechos públicos por diversas entidades en los últimos tiempos, vienen a abrir una puerta a la esperanza, aunque el camino aún sea largo.