(EP/InfoCatólica) "Viajar dos veces en dos años seguidos al mismo país, conllevaría algunas dificultades", indicó el Arzobispo compostelano, quien señaló que la Santa Sede "no lo considera lo más oportuno".
Sin embargo, Monseñor Julián Barrio Barrio dejó la puerta abierta a que el pontífice visite Santiago en 2011, año en el que se cumple el 800 aniversario de la consagración de la Catedral compostelana. "No está descartado y haremos todo lo posible", señaló el Arzobispo, que recordó que Benedicto XVI "siempre ha manifestado un gran deseo de venir a Santiago".
Colaboración
Por otra parte, monseñor Barrio Barrio resaltó la "colaboración" existente con la Administración en la organización de la celebración del Año Santo, ya que, explicó, la Iglesia "no puede llegar -por sí sola- a la organización de los distintos acontecimientos que se van a celebrar" en Santiago durante este año.
Por ello, indicó que la "colaboración" es el "cauce" idóneo para mantener esta relación entre la Xunta y la Iglesia, dado que "en el fondo está en juego el prestigio no solo de la ciudad si no también de la autonomía".
Obras en el Pórtico
En lo relativo a la prolongación de las obras del Pórtico de la Gloria, cuyos andamios no podrán retirarse hasta el año 2011, Julián Barrio recordó que se trata de "una obra grandiosa" que "necesita tiempo para llevarla a cabo", aunque reconoció que le hubiese gustado "encontrarse ya con el Pórtico arreglado y visible para este año".
"Hay momentos de la vida en los que tenemos que sacrificar lo inmediato", indicó el Arzobispo, que aseguró que "lo importante" es "contar con la satisfacción de ver completamente restaurado el pórtico" aunque haya que "sacrificar" sus "deseos" para que "esa obra se haga como debe hacerse".
Asimismo, el Arzobispo se mostró dispuesto a abrir al público este año "el mayor número posible de iglesias" situadas en el Camino de Santiago, aunque recordó los "inconvenientes reales" de este proceso de no contar con una "discreta vigilancia" en los templos, ya que podrían producirse "sorpresas desagradables".
En cualquier caso, monseñor Barrio Barrio explicó que tanto el Arzobispado como la Xunta están haciendo "un gran esfuerzo" para que "sea el mayor número posible de iglesias" las que estén abiertas a los caminantes.
