(Aci/InfoCatólica) "Pienso además –continúa el Pontífice– en el delicado trabajo desarrollado por usted para construir el diálogo con mons. Marcel Lefebvre y no olvidaré nunca la visita en Vercelli que fue para mí motivo de un renovado encuentro con un gran testimonio de la fe, San Eusebio de Vercelli".
Tras recordar que fue Juan Pablo II quien lo llamó a servir en la curia romana, el Papa Benedicto expresa su admiración por el "sensus fidei" del Cardenal, "su preparación doctrinal y canónica así como su ‘humanitas’, que lo ha ayudado mucho a vivir en la Congregación para la Doctrina de la Fe en un clima de auténtica familiaridad, unidad y una decidida y determinada disciplina de trabajo".
Por todas estas cualidades, explica el Santo Padre, "tomé la decisión, en el verano de 2006, de nombrarlo como mi Secretario de Estado y hoy son las razones por las que, también en el futuro, no quisiera renunciar a su preciosa colaboración".
Finalmente el Papa Benedicto XVI desea lo mejor al Cardenal en su labor, lo confía a María Auxiliadora y le imparte su bendición apostólica.