(CNAd/InfoCatólica) La intervención de Bentz se produce en medio de la polémica por la candidatura de Frauke Brosius-Gersdorf, propuesta por el SPD para el Tribunal Constitucional alemán, tras sus declaraciones a favor de despenalizar el aborto. El arzobispo señaló:
«Observaciones de fuentes independientes apuntan a que fuerzas populistas de derechas y críticas con la democracia están exacerbando el debate público y utilizándolo para promover sus propios relatos».
La polémica comenzó cuando la Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ) calificó de altamente problemáticas, desde la perspectiva católica, las declaraciones de Brosius-Gersdorf. Posteriormente, otros medios se hicieron eco de la polémica. Poco antes de la votación prevista inicialmente para el 11 de julio en el Bundestag, cuatro obispos alemanes expresaron públicamente su preocupación: el cardenal Rainer Maria Woelki (Colonia), y los obispos Helmut Dieser (Aquisgrán), Stefan Oster SDB (Passau) y Rudolf Voderholzer (Ratisbona).
Bentz subrayó:
«El derecho a la vida es un bien supremo, pero no sencillo, especialmente en las etapas frágiles del comienzo y el final de la vida. Soy testigo de lo mucho que exige a las personas: en lo personal, en lo político, en lo jurídico y también en el acompañamiento pastoral. Quien se lo toma en serio no puede obviar las tensiones que conlleva, tanto en nuestra sociedad como en las biografías individuales».
Añadió que considera su responsabilidad «defender con claridad y firmeza una convicción, sin perder de vista a las personas que se enfrentan a decisiones difíciles o a situaciones vitales complejas y necesitan acompañamiento y orientación».
Enfatizó que el derecho a la vida «no es un tema exclusivo de determinados grupos sociales ni una postura conservadora, sino la expresión de una sociedad humana y solidaria. Proteger la vida, sobre todo allí donde es débil, no nacida o amenazada, refuerza la confianza en una comunidad que no elude su responsabilidad».
En Alemania, el aborto siendo, aunque desde hace años existen numerosas excepciones y limitaciones que permiten abortar sin consecuencias penales en más de 100.000 casos anuales. En la última legislatura, varios partidos, entre ellos SPD y Verdes, intentaron desvincular la regulación del aborto del ámbito penal, sin éxito debido a la oposición de CDU y CSU.
La candidatura de Brosius-Gersdorf fue inicialmente respaldada por la facción democristiana liderada por Jens Spahn y el canciller Friedrich Merz. Sin embargo, la presión mediática y las críticas de sectores conservadores y cristianos convencidos forzaron el aplazamiento de la votación. Numerosos diputados de la CDU/CSU ya habían anunciado que no votarían a favor de la jurista.