(KNA/InfoCatólica) El arzobispo de Olomouc, Jozef Nuzík, ha decretado una dispensa del deber de asistir a la misa dominical en casos excepcionales debido a la aguda falta de sacerdotes. En una carta leída el pasado domingo en todas las parroquias de la archidiócesis, el prelado explicó que se trata de «una ayuda para quienes, a causa de la escasez de presbíteros, tienen serias dificultades para participar en la santa misa dominical».
Según lo indicado por el prelado, los fieles deben, en caso de que se cancele la misa en su parroquia, intentar acudir a una iglesia cercana o asistir a una celebración de la Palabra con diácono. También se contempla la participación en una misa vespertina del sábado. Si todo ello resultara inviable por motivos graves —como la falta de transporte—, podrán sustituir el precepto dominical mediante oración personal, rezo en familia o seguimiento de una celebración a través de la radio, televisión o internet.
El precepto dominical está regulado por el Código de Derecho Canónico. En el canon 1248 se establece:
§ 1. Cumple el precepto de participar en la Misa quien asiste a ella, dondequiera que se celebre en un rito católico, tanto el día de la fiesta como el día anterior por la tarde.
§ 2. Cuando falta el ministro sagrado u otra causa grave hace imposible la participación en la celebración eucarística, se recomienda vivamente que los fieles participen en la liturgia de la Palabra, si ésta se celebra en la iglesia parroquial o en otro lugar sagrado conforme a lo prescrito por el Obispo diocesano, o dediquen un tiempo conveniente a la oración personal o en familia o en grupos de familias, según la oportunidad.
Jozef Nuzík es arzobispo de Olomouc desde febrero de 2024 y preside la Conferencia Episcopal Checa desde abril. Natural de la región de Eslovaquia Morava, fue ordenado sacerdote en 1995 y desempeñó durante casi veinte años su ministerio en parroquias rurales, por lo que conoce de cerca el catolicismo popular en la provincia eclesiástica de Moravia.