(CNA/InfoCatólica) Líderes de diversas confesiones cristianas en Tierra Santa han expresado su profunda indignación tras los bombardeos llevados a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) durante el Domingo de Ramos, que incluyeron dos impactos de misil contra el hospital Al-Ahli, situado en la Ciudad de Gaza y gestionado por la diócesis Anglicana Episcopal de Jerusalén.
La institución religiosa condenó «en los términos más enérgicos» lo que describió como el quinto ataque contra el hospital desde que comenzó la guerra en 2023. En su comunicado del domingo, la diócesis informó del fallecimiento de un niño que sufría una lesión craneal y que «murió trágicamente como consecuencia del proceso de evacuación apresurado», llevado a cabo en menos de 20 minutos.
«La diócesis de Jerusalén está consternada por el bombardeo del hospital, y más aún al producirse en la mañana del Domingo de Ramos y al inicio de la Semana Santa», afirmó el comunicado. «Hacemos un llamamiento a todos los gobiernos y personas de buena voluntad para que intervengan y detengan todo tipo de ataques contra instituciones médicas y humanitarias. Oramos y pedimos el fin de esta guerra horrorosa y del sufrimiento de tantos».
Edificio gravemente afectado
Aunque no se han reportado más víctimas mortales como consecuencia del ataque, la diócesis anglicana detalló que el doble impacto destruyó por completo el laboratorio genético de dos plantas del hospital y causó daños considerables en la farmacia y el departamento de urgencias. También se registraron destrozos en la zona colindante, incluida una iglesia cercana.
El patriarca ortodoxo de Jerusalén, Theófilo III, subrayó en un comunicado del 13 de abril que los hospitales están protegidos por el derecho internacional. «Este hospital, ya gravemente afectado por meses de asedio, era uno de los últimos baluartes de esperanza médica en Gaza, donde decenas de instituciones sanitarias han sido destruidas sistemáticamente», afirmó. «Arrasar estos santuarios de vida y dignidad es una tragedia que trasciende la política y entra en el terreno de lo sagrado».
Único hospital cristiano
Al-Ahli es el único hospital cristiano en Gaza y uno de los pocos grandes centros médicos que continúan operativos en la zona norte del enclave, según la agencia Associated Press.
Tras el ataque, las IDF informaron en una publicación en redes sociales que el objetivo había sido un «centro de mando y control de Hamás dentro del hospital Al-Ahli», desde el cual —según afirmaron— se habrían estado planificando y ejecutando ataques contra civiles israelíes y tropas del ejército.
«A pesar de que las IDF han declarado en repetidas ocasiones que debe cesar toda actividad militar en instalaciones médicas de Gaza, Hamás continúa violando descaradamente el derecho internacional y utilizando a la población civil», añadieron. El comunicado israelí explicó que antes del bombardeo se adoptaron medidas para minimizar los daños a civiles y al propio hospital, incluyendo advertencias previas en la zona, el uso de municiones de precisión y vigilancia aérea.
La realidad es que ningún miembro de Hamás se vio afectado por el ataque.