(ACIPrensa/InfoCatólica) La figura de Santa Teresa de Lisieux —más conocida como Santa Teresita del Niño Jesús— continúa siendo una fuente inagotable de inspiración para millones de fieles en todo el mundo. Conocida por su «caminito» de sencillez, entrega y confianza plena en Dios, esta joven carmelita, patrona de las misiones, sigue tocando corazones a un siglo de haber sido elevada a los altares.
Con motivo del centenario de su canonización, celebrada el 17 de mayo de 1925 por el Papa Pío XI, la Arquidiócesis de Santa Fe de la Vera Cruz (Argentina) acoge con alegría la visita de sus reliquias. Este acontecimiento espiritual tiene lugar en el marco del Año Jubilar, un tiempo especial de gracia, renovación interior y esperanza para todos los creyentes.
Durante este periodo jubilar, la arquidiócesis anima a los fieles a profundizar en el ejemplo de vida de Santa Teresita, cuya espiritualidad sencilla y amor ardiente por Jesús la han convertido en una de las santas más queridas del mundo católico. A través de este recorrido con sus reliquias, se invita a redescubrir su testimonio de fe vivida en lo cotidiano, su entrega total al Padre y su confianza en la Providencia divina.
La peregrinación de las reliquias ya ha comenzado: tuvo su inicio en el Seminario y luego pasó por la Basílica Nuestra Señora de Guadalupe. Entre el 12 y el 15 de abril estarán en la parroquia Nueva Pompeya, y del 16 al 20 visitarán la Casita Mama Antula. El itinerario completo se puede consultar en línea, ya que está previsto que el recorrido continúe hasta diciembre.
La organización de este significativo acontecimiento ha estado a cargo del Consejo Arquidiocesano de Laicos, que, al convocar a la comunidad a participar, expresó: «Las Reliquias son frágiles signos que nos conectan con Dios. Dios se nos hace presente, nos habla y actúa a través de la vida de los santos, testigos y seguidores suyos».
El punto culminante de esta peregrinación será el 17 de mayo, cuando se conmemoren los 100 años de su canonización. Ese día, las reliquias estarán presentes en las celebraciones especiales organizadas en la parroquia Santa Teresita, donde los fieles podrán rendir homenaje y pedir su intercesión.
¿Quién fue Santa Teresita del Niño Jesús?
Santa Teresa de Lisieux fue una carmelita descalza nacida en Francia, que vivió en la segunda mitad del siglo XIX. Su vida breve —murió a los 24 años— fue testimonio de una fe intensa vivida en el silencio del convento, en medio de sufrimientos físicos y pruebas espirituales. Desde el claustro, su alma ardía en celo misionero, y su espiritualidad del amor y de las pequeñas cosas la llevó a una profunda unión con Cristo.
Canonizada en 1925, fue proclamada patrona universal de las misiones y, en 1997, Doctora de la Iglesia. El Papa Francisco ha manifestado en varias ocasiones su aprecio por ella, a quien considera una «amiga espiritual».