(CNAd/InfoCatólica) Según los datos publicados el pasado jueves por el Instituto Federal de Estadística de Alemania, el número de abortos realizados en el país durante 2024 ascendió a 106.000, lo que supone un ligero aumento respecto al año anterior. La cifra continúa por encima del nivel registrado entre los años 2014 y 2020, cuando el número de casos notificados osciló entre los 99.000 y 101.000 anuales.
Siete de cada diez mujeres (69%) que se realizaron un aborto en 2024 tenían entre 18 y 34 años, mientras que el 20% tenía entre 35 y 39 años. El 9% de las mujeres tenían 40 años o más y el 3% eran menores de 18 años. El 43% de las mujeres no había dado a luz antes del aborto.
Ante estos datos, Cornelia Kaminski, presidenta federal de la organización provida ALfA, declaró:
«Se trata de un nuevo incremento en una cifra ya muy elevada, lo que desmiente una vez más, de forma contundente, la afirmación de que existe una “insuficiente cobertura de centros para abortar”. Si por décima vez consecutiva las cifras aumentan, es evidente que no hay ni estigmatización ni criminalización».
La activista subrayó además las consecuencias de los abortos, especialmente cuando se realizan bajo presión:
«Lo que sí está científicamente bien documentado y fuera de duda son las secuelas del aborto, sobre todo cuando no es deseado y se produce por presión externa. En el 30 % de los casos, el principal impulsor es el padre del niño. Que las mujeres sufran a menudo graves consecuencias psicológicas es algo evidente».
Kaminski criticó también los debates políticos actuales en torno a la liberalización del aborto:
«A la vista de estas cifras, resulta políticamente casi cínico y demográficamente suicida que la política se plantee cuestiones como anticonceptivos gratuitos para todos, abortos financiados por los seguros médicos y una legalización total del aborto».
La presidenta de ALfA concluyó con un llamamiento a los partidos que negocian una futura coalición de gobierno:
«Harían bien en afrontar la realidad y establecer por fin las condiciones necesarias para una política que apoye a las familias, a los niños y a las mujeres».