(ElProgreso/Infocatólica) El cardenal Rouco realizó estas declaraciones tras recordar los orígenes del Hospital Asilo de Vilalba, «una obra buena», que hoy continúa en el ejercicio de los cometidos para los que fue creado, señaló. El cardenal recordó en esse sentido el apoyo unánime del pueblo de Vilalba a una iniciativa promovida hace ya 100 años por las personas que entonces podían considerarse como el grupo de notables de la capital chairega y que aunó las sinergias de «la sociedad cristiana, representada en la parroquia de Santa María de Vilalba, y del resto de la ciudadanía».
«La nueva concepción laicista del mundo hace pensar que hoy en día resultaría difícil que una iniciativa de estas características tuviera los mismos apoyos», señaló el cardenal chairego, quien afirmó que el Hospital Asilo sintetiza «la unidad del pueblo de Vilalba y constituye una obra de extensión de la caridad y amor al prójimo».
En una homilía, el prelado insistió reiteradamente en la conveniencia de «unir lo social, lo civil, lo cultural con la faceta espiritual de cada uno de los ciudadanos», porque, aunque resulte extraño, agregó don Antonio María, «el hecho de que se acepte globalmente el calendario cristiano supone implícitamente que todo el mundo reconoce que el nacimiento de Jesucristo supuso el inicio de una nueva era».
La eucaristía oficiada por el cardenal Rouco Varela en la iglesia parroquial de Santa María de Vilalba y que estuvo concelebrada por el obispo de Lugo, Monseñor Alfonso Carrasco, así como por varios presbíteros de la diócesis de Mondoñedo-Ferrol, sirvió de colofón al amplio programa de actividades organizado por el patronato de la Fundación Hospital Asilo de Vilalba para conmemorar esta efeméride.
Al final del oficio religioso, los prelados, así como el resto del clero presente, los miembros del patronato de la Fundación Hospital Asilo y las autoridades locales compartieron un almuerzo de hermandad.