(ACIprensa/InfoCatólica) El arranque de la Serie del Caribe 2025, que reúne a los equipos campeones de las ligas invernales de México (país anfitrión), Puerto Rico, República Dominicana, Venezuela y Japón, estuvo marcado por una ceremonia religiosa. En el estadio donde se disputarán los encuentros, se llevó a cabo una misa, la exposición del Santísimo Sacramento y la coronación de la Virgen de Guadalupe.
Este torneo anual de béisbol profesional es una de las competencias más importantes de la región, en la que este año participan los Charros de Jalisco (México), Indios de Mayagüez (Puerto Rico), Leones del Escogido (República Dominicana), Cardenales de Lara (Venezuela) y el equipo invitado, Japan Breeze (Japón).
El formato de la competencia incluye una primera fase de enfrentamientos entre todos los equipos, que se desarrollará de viernes a lunes. Posteriormente, los mejores clasificarán a las semifinales, seguidas por el partido por el tercer puesto y la gran final, programada para el 7 de febrero.
Durante la Misa, Mons. Enrique Sánchez Martínez, Obispo de la Diócesis de Mexicali, destacó la importancia de la unidad, tomando como referencia el mensaje de la Virgen de Guadalupe.
En su homilía, señaló que, pese a las dificultades y a la «influencia atea, o contra Dios, contra Jesús, contra la Virgen», la Madre de Dios continúa siendo un símbolo de unión y comunión. Subrayó que su mensaje sigue vigente, invitando a las personas a superar sus diferencias y a fomentar la paz y la armonía.
Además, el obispo recordó que la Virgen ha estado presente a lo largo de la historia, ayudando a preservar lo más valioso: la vida de cada persona. Finalmente, hizo un llamado a la sociedad para trabajar en la construcción de la unidad, especialmente en tiempos de crisis y fragmentación, superando las divisiones que generan dolor y tristeza.