(LaNacion/InfoCatólica) El cardenal recordó que dicho proyecto busca una sociedad donde siempre se respete la vida y se establezcan condiciones de dignidad para todos los chilenos. «Debemos construir una sociedad sobre el fundamento de la verdad en la que se ponen las condiciones para que todos puedan tener una existencia digna y feliz» recalcó el prelado.
En la tradicional Misa del Gallo, el obispo de Santiago de Chile, cardenal Errázuriz, se preguntó si el próximo Presidente de Chile colaborará para que los deseos de los ciudadanos se materialicen en el próximo gobierno: «¿Colaborará con Dios y con nuestras esperanzas, construyendo con nosotros la sociedad como reflejo del Reino de Dios, del que vino a instaurar Jesucristo, es decir, como una sociedad construida sobre el fundamento de la verdad, en la cual se respeta siempre la vida y se ponen las condiciones para que todos puedan tener una existencia digna y feliz?», expresó.
Llamamiento a los parlamentarios y gobernantes
El cuestionamiento también lo hizo extensivo a los parlamentarios, ya que la futura administración que se disputarán el 17 de enero Eduardo Frei y Sebastián Piñera necesitará respaldo «en la edificación de una sociedad basada en la justicia y el amor, un pueblo colmado de paz, constituido por familias que sean santuarios de la vida y la confianza, donde los hijos tengan el apoyo estable de sus padres; un pueblo donde los más pobres tengan educación y salud de calidad, donde los que viven en la calle, tengan trabajo y esperanza, lejos de la droga».
Luego y centrándose en la celebración el cardenal Errázuriz instó a reflexión acerca del sentido de la Navidad y de las esperanzas de un país en tiempo de elecciones. «No deseamos otros bienes con mayor anhelo que aquellos que Él nos trae: su luz asombrosa, llena de verdad, que nos saca de los tropiezos de la oscuridad, el amor generoso y el perdón gratuito de Dios, la reconciliación, la fraternidad y la solidaridad entre nosotros, la vida colmada de amor, generosidad y paz». Finalmente, el Arzobispo de Santiago deseó a los fieles participantes «una Navidad muy feliz, que prolongue entre ustedes la paz y las bendiciones de Belén».