(Camineo/InfoCatólica) Monseñor Asenjo intervino en la cita «Implicaciones de la dignidad humana para las tres tradiciones monoteístas», organizada por la Fundación Tres Culturas del Mediterráneo. El encuentro asistieron igualmente el cardenal Walter Kasper, el Cardenal Tauran, el Patriarca latino de Jerusalén, Monseñor Fuad Twal, junto a otros 27 líderes religiosos cristianos, judíos y musulmanes.
El arzobispo de Sevilla, al dirigirse a los participantes, les aseguró que «les recibe una tierra tempranamente evangelizada, de historia venerable, especialmente por el número y la calidad de sus Santos, por el catálogo impresionante de sus Arzobispos, entre los cuales descuellan San Isidoro y San Leandro, padres de la Iglesia hispana y de la liturgia visigótica«. «Les recibe una Iglesia –añadió Monseñor Asenjo– que ha sido capaz de aflorar un sinnúmero de instituciones señeras en el campo educativo, en el campo de la asistencia social y para el servicio de los pobres, muchas de las cuales perviven todavía».
Importancia de la religiosidad popular
El prelado sevillano explicó que «la Iglesia de Sevilla ha sido capaz de crear a lo largo de los siglos, especialmente en la época medieval, en el Renacimiento y en el Barroco, una riqueza artística esplendorosa, manifestación de sus profundas raíces cristianas».
En ese sentido, don Juan José afirmó que «una característica de la vida de esta Iglesia particular es la presencia viva de la llamada religiosidad o piedad popular: las Hermandades y Cofradías, casi todas ellas centradas en el Misterio Pascual de Cristo muerto y resucitado, son para muchos andaluces camino de vida cristiana y están siendo un dique frente a la secularización, que aquí es ciertamente menos intensa en otras zonas de España».