(CNA/InfoCatólica) El Vaticano recibió el pasado 21 de noviembre un majestuoso abeto de 95 pies proveniente de la localidad de Ledro, en el norte de Italia, como parte de la tradición navideña en la Plaza de San Pedro. Sin embargo, la llegada del árbol ha estado envuelta en polémica desde octubre, cuando una petición publicada en la plataforma Change.org llamó la atención sobre las implicaciones ambientales de su tala.
La iniciativa, promovida por la asociación de protección de la fauna Bearsandothers, reunió más de 53.000 firmas en protesta contra lo que calificaron como una «práctica consumista» incompatible con las enseñanzas del Papa Francisco sobre el cuidado del medio ambiente. En la carta abierta dirigida al pontífice y a las autoridades locales, los firmantes lamentaron el uso de árboles vivos para «propósitos efímeros» y criticaron los gastos asociados al traslado, estimados en 60.000 euros.
«Pedimos su ayuda para enviar un mensaje contundente sobre la importancia de valorar y respetar el papel del mundo vegetal en esta era de anomalías climáticas cada vez más dramáticas», expresaba el documento.
El Vaticano defendió la elección del árbol en un comunicado emitido en septiembre, asegurando que se llevó a cabo «con respeto a la sostenibilidad». Según explicaron, el abeto seleccionado es un ejemplar maduro, cuya extracción responde a criterios de reemplazo natural.
El árbol principal, junto con una cuarentena de abetos más pequeños provenientes de Ledro y otras localidades de Italia, Alemania y la República Checa, se exhibirá en edificios del Vaticano. El encendido oficial del árbol y la inauguración del tradicional Belén que lo acompaña están programados para el próximo 7 de diciembre. Ambas decoraciones permanecerán en la Plaza de San Pedro hasta el 12 de enero de 2025, coincidiendo con la festividad del Bautismo del Señor.
Mientras tanto, el imponente abeto ha permanecido sobre el camión que lo transportó, sin ser colocado en su base, lo que aumenta la expectación y las preguntas en torno al desenlace de esta polémica navideña.