(CNA/InfoCatólica) La Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de los Estados Unidos (ATF, por sus siglas en inglés) recomienda a las comunidades religiosas ejercer una «vigilancia aumentada» y adoptar nuevas medidas de seguridad ante una serie de recientes incidentes de incendios provocados contra iglesias.
La ATF declaró que «insta a todas las instituciones religiosas a tomar medidas de seguridad reforzadas para proteger a sus congregaciones e instalaciones» tras varios actos de incendio intencionado dirigidos contra iglesias en Massachusetts y Rhode Island.
En un comunicado emitido el 8 de noviembre, la oficina afirmó que no existen «amenazas específicas» contra las iglesias, pero que las autoridades «recomiendan vigilancia y pasos proactivos para prevenir posibles incidentes».
La agencia federal citó varios incendios en iglesias de Nueva Inglaterra en los últimos meses, incluido un incendio en una parroquia católica en Franklin, Massachusetts.
Los investigadores calificaron el incendio de octubre en la iglesia St. Mary de Franklin como un acto de incendio provocado. La iglesia, perteneciente a la Arquidiócesis de Boston, fue cerrada temporalmente tras el incidente; la parroquia ha estado celebrando Misa en su capilla mientras recauda fondos para restaurar el espacio principal de culto.
En su comunicado, la ATF sugirió que las iglesias implementen diversas medidas de seguridad reforzada, como cámaras de vigilancia, acceso restringido a las instalaciones y planes de emergencia actualizados.
La oficina también recomendó que las casas de culto «mantengan una comunicación abierta con la policía local y la ATF, reporten de inmediato cualquier actividad sospechosa y evalúen opciones para patrullas regulares en la zona».
La ATF está comprometida con «proveer apoyo a las instituciones religiosas para mejorar su seguridad», afirmó la agencia.
Las iglesias católicas bajo ataque
Varias iglesias católicas en Estados Unidos han sufrido incendios recientemente. Un incendio ocurrido en la madrugada del 18 de octubre dañó gravemente la iglesia St. Anthony of Padua en Casa Grande, Arizona.
Por otro lado, una iglesia católica en Florida ha enfrentado múltiples incendios en solo 16 meses, siendo el más reciente investigado actualmente como un acto de incendio provocado.
Más allá de los incendios, las iglesias católicas en todo Estados Unidos han sido objeto de repetidos actos de vandalismo en los últimos meses y años.
Una parroquia en Arkansas fue atacada en tres ocasiones recientes, incluyendo la destrucción de una estatua de la Virgen María en los terrenos parroquiales.
Mientras tanto, la parroquia St. Francis de Sales en Sherman Oaks, California, fue atacada varias veces durante el verano, incluyendo grafitis y actos de incendio provocados en cuatro ocasiones, desde agosto hasta septiembre.
En marzo, el senador de Florida Marco Rubio pidió al gobierno proteger a las iglesias católicas de estos ataques, citando un rastreador que registró más de 400 ataques contra iglesias católicas desde mayo de 2020.
