(LifeNews/InfoCatólica) Diego Salinas, estudiante de último año en la escuela secundaria Sonia Sotomayor de San Antonio, Texas, sigue defendiendo sus derechos de la Primera Enmienda después de que la administración de su escuela suspendiera injustamente su club provida en octubre. En una reciente entrevista con CatholicVote, Salinas explicó los detalles de esta controversia y destacó la importancia de reinstaurar su club.
CatholicVote informó en octubre que la administración suspendió el capítulo de «Students for Life of America» dirigido por Salinas tras ganar atención en la escuela y generar rechazo en la comunidad escolar.
«Realmente era el tema del momento en la escuela», dijo Salinas. «Se estaban llevando a cabo debates en la clase de gobierno y había mucho ruido al respecto. Lo que no sabía es que, al parecer, la directora había estado recibiendo muchos correos electrónicos de padres durante el fin de semana, preguntando ‘¿Por qué existe este club?’, ‘¿Qué hace aquí?’, ‘Es algo político’».
La administración también le objetó el uso del nombre de la escuela en la cuenta de Instagram del club, «@sotomayor_for_life», y lo obligó a eliminar la cuenta. Sin embargo, Salinas señaló que otros clubes estudiantiles con nombres similares en redes sociales no recibieron las mismas instrucciones.
Dos días después de eliminar la cuenta, Salinas fue llamado a la oficina de la directora. El subdirector le informó que la directora, Ada Bohlken, había tomado la decisión de suspender el club «hasta nuevo aviso», argumentando que «estaba creando una distracción en el entorno educativo».
«Más tarde, también intentó justificarlo diciendo que era un peligro para mi seguridad porque estaba recibiendo mensajes personales; sin embargo, nunca recibí amenazas y tampoco la escuela recibió amenazas en mi nombre», añadió Salinas. «Si eso hubiera ocurrido, habrían tenido que involucrar a la policía».
Además, Salinas recordó que, al ser informado de la suspensión, pidió permiso para llamar a su padre, Brian Salinas, pero el subdirector se negó.
«Me dijo: “No, él no tiene que estar en la llamada porque no es parte del club, así que no tengo que hablar con él”», relató Salinas.
Tras la suspensión, Salinas se reunió con abogados de *Students for Life of America*. El 21 de octubre, el consejero general de la organización envió una carta de demanda a la escuela, acusándola de discriminación inconstitucional contra el club y solicitando su reinstauración.
«Aunque la escuela afirma que la suspensión podría deberse a una posible reacción negativa, no ha proporcionado ejemplos de un disturbio que justifique la suspensión», se lee en la carta. «Además, es una violación constitucional silenciar al orador cuando son sus opositores quienes están causando problemas».
La escuela tenía hasta el 28 de octubre para responder, pero ignoró la carta, dejando la demanda en manos de la junta escolar. Salinas indicó que sospecha que el caso está acercándose a un litigio.
Si el club hubiera podido continuar, Salinas y sus compañeros planeaban enfocarse en apologética provida y en recolectar donaciones para centros de salud para mujeres en el área.
«El objetivo del club era fomentar conversaciones y promover la positividad en lugar de la negatividad al abordar temas tan sensibles como el aborto», dijo.
Salinas compartió que comenzó a involucrarse en el trabajo provida al inicio de la escuela secundaria, después de asistir a la Marcha por la Vida.
«Fue increíble ver a más de 70,000 personas juntas… Pero lo que realmente me marcó fue caminar por las calles y ver las pantallas que mostraban lo que realmente implica el aborto», recordó. «Fue la primera vez que realmente quise llorar al ver una imagen. Fue algo horrible y terrible que abrió mis ojos a lo importante que es este tema».
Después de graduarse, Salinas planea continuar abogando por la protección de la vida de los no nacidos.
«Definitivamente tengo la intención de seguir defendiendo esta causa», afirmó. «Una bendición que siempre he tenido es la capacidad de hablar, y quiero seguir usándola al entrar a la universidad y más allá. Me gustaría convertirme en orador político y quizá crear un canal de YouTube o un pódcast para abordar estos temas».
También subrayó la importancia de cuestionar la decisión de la escuela de cerrar su club, afirmando que el problema trasciende a un pequeño grupo de estudiantes.
«Creo que es importante que la gente se dé cuenta de que, en este momento, se trata de un grupo provida, pero… independientemente de lo que se crea, este es un problema que ahora afecta a todos porque es un tema de libertad de expresión», destacó.
«Creo que la capacidad de hablar sobre estos temas en lugar de pelear por ellos es lo que realmente llevará a nuestro país hacia la unidad y, en general, permitirá resolver estas cuestiones mucho más rápido», concluyó.