(NCregister/InfoCatólica) Mons. Broglio comentó el resultado de las elecciones en el programa The World Over With Raymond Arroyo de EWTN. En esta elección, la mayoría de los católicos -según algunas encuestas a pie de urna, un 56 %- votaron por Trump.
«Creo que, sin duda, nuestra preocupación preeminente por la dignidad de la persona humana es algo que habría influido en esos votantes», aseguró.
«Pienso también que las personas sienten incertidumbre en cuanto a la economía. Creo que ese sería otro factor. Además, en un sentido muy real, los católicos han visto lo que hizo la primera administración de Trump para apoyar la vida humana. Creo que quizá eso también sería, sin duda, un factor que influye», añadió el arzobispo Broglio.
También señaló que la campaña de la vicepresidenta Kamala Harris «no dejaba espacio para la libertad de conciencia» respecto al tema del aborto.
«Además, en un sentido muy real, la vicepresidenta Harris hizo del derecho al aborto casi el tema central de su campaña. Creo que eso habrá desalentado a muchos, muchos católicos», indicó el prelado
Cuando se le preguntó cuáles eran las prioridades de la conferencia episcopal ante la administración de Trump, dijo que «realmente siguen sin cambios».
«Por supuesto, existe la preocupación por la dignidad de la persona humana desde el momento de la concepción hasta la muerte natural: eso sigue siendo una preocupación preeminente para los obispos», dijo el arzobispo.
También destacó la «tremenda preocupación» por los pobres y los sin techo en el país.
«Somos una nación muy afortunada, y tenemos muchas, muchas ventajas. Sin embargo, a veces en nuestras grandes ciudades vemos un número enorme de personas sin hogar», comentó:
«Sabemos que hay otras personas que tienen dificultades para llegar a fin de mes. Queremos ser conscientes de ellas y tratar de ayudarles, ciertamente a través de la caridad, pero también intentando encontrar soluciones a los problemas de raíz que mantienen a las personas en la pobreza».
La migración es también un tema clave para el arzobispo Broglio y los obispos estadounidenses, tanto en la frontera misma como en cuestiones internacionales:
«Una tercera preocupación sería tratar de reformar la política migratoria o la ley de inmigración en este país para que la migración sea ordenada, que sea legal, y que parte de la tensión que hemos experimentado en la frontera pueda resolverse».
Unida a esta preocupación está «la función que Estados Unidos desempeña a nivel internacional», señaló el arzobispo.
«Deberíamos ser capaces de intentar abordar algunos de los problemas que obligan a las personas a considerar dejar sus países de origen para ir a otro lugar», dijo. «Si pudiéramos ayudar a resolver algunos de esos problemas, esa sería otra forma desde el exterior de reducir la tensión en las fronteras».
Cuando se le preguntó sobre el apoyo de Trump a la fecundación in vitro (FIV), el arzobispo Broglio enfatizó que dicha tecnología reproductiva es contraria a la enseñanza de la Iglesia.
«Intentaremos seguir reiterando lo que enseña la Iglesia: que el niño no nacido en el vientre tiene derecho a vivir, tiene derecho a nacer, y que la concepción debe ser el resultado de la unión natural entre esposo y esposa. Así que la FIV realmente no es una solución», explicó el arzobispo Broglio.
A principios de este año, Trump propuso que el gobierno financiara los servicios de FIV. También ha moderado su postura provida, prometiendo vetar una posible ley federal para proteger a los niños no nacidos.
En una entrevista anterior con Arroyo en octubre, Trump expresó su apertura a exenciones religiosas para el mandato de FIV, diciendo: «Me parece una idea bastante buena».
El arzobispo Broglio explicó: «Intentaremos seguir presentando esa enseñanza con la esperanza de encontrar oídos receptivos en la nueva administración».