(CNA/InfoCatólica) El obispo de la Diócesis de Jefferson City, Missouri, Mons. W. Shawn McKnight, emitió el pasado 5 de noviembre un nuevo decreto revocando su reciente prohibición sobre doce himnos considerados «problemáticos desde el punto de vista doctrinal» en las liturgias diocesanas. En su lugar, ha instaurado un proceso de consulta de un año para evaluar la música sagrada que se emplea en las celebraciones eucarísticas, con el fin de asegurar la participación activa de los fieles y el respeto a los principios doctrinales.
La medida inicial, establecida el 24 de octubre, vetaba himnos populares como «All Are Welcome» de Marty Haugen, «God Has Chosen Me» de Bernadette Farrell, «Led By the Spirit» de Bob Hurd y «Table of Plenty» de Dan Schutte, entre otros, con vigencia a partir del 1 de noviembre. Sin embargo, tras recibir diversas opiniones de sacerdotes, músicos y fieles, Mons. McKnight reconoció la necesidad de una mayor consulta sinodal antes de implementar decisiones sobre temas litúrgicos de este tipo.
El obispo destacó que esta decisión se alinea con el concepto de «sinodalidad» promovido por el Papa Francisco, el cual invita a la Iglesia a escuchar y dialogar en un espíritu de apertura. Mons. McKnight señaló que el objetivo es consultar a los grupos pertinentes dentro de la diócesis para que las futuras políticas litúrgicas reflejen tanto la tradición como las necesidades de la comunidad local.
Aunque el nuevo decreto no menciona los himnos inicialmente prohibidos, mantiene la directriz de evaluar la música litúrgica basándose en seis criterios establecidos en 2020 por el Comité de Doctrina de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos. Estos criterios orientan a los pastores y ministros litúrgicos a evitar canciones que presenten enseñanzas erróneas sobre doctrinas clave, como la Eucaristía, la Santísima Trinidad, la naturaleza de la Iglesia y la dignidad humana.
El decreto continúa prohibiendo el uso de composiciones de músicos que hayan sido «acusados de manera creíble de abuso sexual» por sus respectivas autoridades eclesiásticas, como es el caso de David Haas, Cesaréo Gabaráin y Ed Conlin.
Asimismo, se ratifica la recomendación de cuatro arreglos musicales aprobados para la celebración de la Misa en la diócesis: la «Misa Cantada», la «Misa de Santa Frances Cabrini» de Kevin Keil, la «Misa Revisada de la Creación» de Marty Haugen y la «Misa del Pueblo Inmigrante», una opción bilingüe español-inglés de Bob Hurd. Aunque no es obligatorio usarlos, se sugiere a las parroquias familiarizarse con ellos para promover la unidad en las celebraciones.
El nuevo proceso de consulta será coordinado por la comisión litúrgica diocesana, que recopilará opiniones de músicos, ministros de música y otros miembros interesados hasta agosto de 2025. Este informe será entregado al consejo pastoral diocesano y al consejo presbiteral, quienes asesorarán al obispo antes de que este tome una decisión definitiva sobre las políticas de música litúrgica.
En declaraciones publicadas en el Catholic Missourian, Mons. McKnight expresó:
«Es inspirador ver tanto entusiasmo por la música que da vida a nuestras liturgias católicas… Invitar a nuestra diócesis a un proceso de discernimiento sinodal permitirá que el Espíritu Santo nos guíe en este tema importante».
El obispo concluyó subrayando el poder formativo de la música en la fe católica y la necesidad de promover himnos que transmitan con precisión las enseñanzas de la Iglesia.