(KathPress/InfoCatólica) Dentro de un corto plazo, los Museos Vaticanos exhibirán un fragmento de mosaico de 800 años de antigüedad que formaba parte de la fachada de la antigua Basílica de San Pedro. La pieza, que muestra la cabeza del evangelista Lucas, es uno de los pocos artefactos conservados del edificio predecesor de la actual basílica papal y data aproximadamente del año 1230. Se presenta en una exposición especial dedicada a San Francisco de Asís y su época.
Con esta exposición, los Museos Vaticanos buscan honrar no solo a un santo especial, sino también a un papa particular, el primero en elegir este nombre, indicó la directora Barbara Jatta en referencia al Papa Francisco. El cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, tras su elección en 2013, fue el primero en la historia en tomar el nombre de Francisco.
Según Jatta, la exposición es una de las muchas iniciativas de las Colecciones Pontificias para el Año Santo 2025. Para este importante evento dentro de la Iglesia Católica, que el Papa abrirá en la Nochebuena, la directora anunció la publicación de una nueva guía del museo en inglés.
La exhibición, ubicada en las salas medievales de la Pinacoteca, presenta junto al fragmento de mosaico una gran tabla del Juicio Final realizada por los artistas Nicolo y Giovanni, así como frescos y otras pinturas que ilustran la vida de San Francisco de Asís (ca. 1181-1226). La muestra conmemora el 800º aniversario de su estigmatización. Según la tradición, a partir del 17 de septiembre de 1224, Francisco presentó los estigmas de Cristo en manos, pies y costado.
Solo dos años después de su muerte, el popular fundador de la orden fue canonizado por el Papa Gregorio IX (1227-1241), quien también encargó el ahora restaurado fragmento de mosaico de la fachada de la primera Basílica de San Pedro, construida en el siglo IV. Esta iglesia, erigida por Constantino el Grande sobre la tumba del apóstol Pedro, fue renovada y ampliada a partir de 1506.
Francisco de Asís fue el primero y uno de los estigmatizados más destacados, aunque el número total de personas con estigmas es incierto. Entre los más conocidos se encuentran Teresa de Ávila (1515-1582), Ana Catalina Emmerick (1774-1824), Teresa Neumann (1898-1962) y el Padre Pío (1887-1968).