(KathPress/InfoCatólica) Por primera vez desde la presentación de un estudio nacional sobre abusos, el parlamento de la Iglesia Evangélica en Alemania (EKD) se reúne en sesión. El sínodo tendrá lugar del 11 al 13 de noviembre en la ciudad bávara de Würzburg. Los 128 delegados discutirán públicamente los resultados del estudio y aprobarán varias medidas para combatir la violencia sexualizada. Sin embargo, el tema central de la sesión, según lo planeado por la presidencia del sínodo, será la migración y los derechos humanos. También está en la agenda el diálogo con la Iglesia Católica, con la asistencia del presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, el obispo Georg Bätzing, como invitado.
El estudio sobre abusos en la EKD y Diakonie fue presentado a finales de enero por investigadores independientes en Hannover. El informe reveló, en archivos de la iglesia, indicios de 2.225 víctimas y 1.259 acusados desde 1946. Además, los autores del estudio dieron una evaluación negativa a la Iglesia y a Diakonie en cuanto a la gestión de los casos de abuso.
Los miembros del parlamento eclesiástico aprobarán, entre otras medidas, una reforma del derecho disciplinario interno de la Iglesia. Con ello, se busca permitir a las víctimas de abusos el acceso a los expedientes en los procedimientos internos contra los empleados acusados. También se votará sobre la creación de una oficina central de defensores para las víctimas, la reforma de la directriz de protección contra la violencia de la EKD y una mayor consideración del tema en la teología. Sin embargo, la implementación de un procedimiento uniforme a nivel nacional para los pagos de reconocimiento a las víctimas aún enfrenta obstáculos y, a diferencia de lo previsto, no se aprobará en el marco de la sesión del sínodo.
Además, en la reunión del sínodo se tomarán decisiones importantes sobre algunos cargos. Tras la renuncia de Annette Kurschus como presidenta del consejo de la EKD el año pasado, debe determinarse su sucesión. La presidenta interina del consejo, Kirsten Fehrs, se presentará para el cargo, y su confirmación es prácticamente segura. Asimismo, deben cubrirse tres vacantes en el consejo de 15 miembros, para las cuales hasta el momento se han postulado cuatro candidatos. Este órgano de dirección representa a la iglesia evangélica en el ámbito público y se pronuncia sobre cuestiones de convivencia religiosa y social.
Con miras a las medidas planificadas, Nancy Janz, portavoz de las víctimas, cuenta con el pleno apoyo del parlamento eclesiástico: «En principio, espero que los sinodales despierten un poco», dijo Janz antes de la reunión del sínodo de la EKD. Se trata de muchos puntos controvertidos. «Se necesita un gran apoyo y todas las iglesias regionales deben colaborar». En cuanto a la cuestión de la uniformidad en los pagos de reconocimiento a las víctimas, Janz instó a llegar a un acuerdo rápido: «Solo así podemos lograr una regulación unificada y evitar que las iglesias regionales vuelvan a actuar de manera independiente».