(Efe/InfoCatólica) Con el apoyo de Nelson, la mayoría demócrata suma los sesenta votos que necesita en el Senado para desbloquear cualquier intento de veto de la oposición republicana y poder aprobar finalmente la reforma sanitaria, tras meses de debate y negociación en el Capitolio.
Pese al anuncio de Nelson de que apoyará la medida, la oposición republicana busca retrasar lo más posible la votación sobre el proyecto de ley. El objetivo de los demócratas es aprobar la medida antes del día de Navidad, lo que podría suponer una votación durante la propia Nochebuena.
La versión definitiva de la medida que proponen los demócratas ha eliminado la creación de una opción pública, un seguro sanitario público que compitiera con el sector privado. En su lugar, se permitirá a las aseguradoras privadas que puedan ofrecer planes de cobertura en todo el país, en lugar de estar sometidos a las regulaciones de cada estado diferente.
Una de las grandes innovaciones de la medida es la prohibición a las aseguradoras de rechazar dar cobertura a quienes padezcan ya enfermedades. Esa prohibición tendría efecto inmediato para los niños, y se extendería a toda la población para 2014. El proyecto de ley también impone más límites a los beneficios de estas compañías.