(CNA/InfoCatólica) La ASPS recientemente llamó la atención por distanciarse del consenso médico. Mmuchas organizaciones médicas importantes en EE.UU. continúan apoyando tanto los tratamientos hormonales como las cirugías para menores con disforia de género.
El Dr. Scott Bradley Glasburg, presidente de la Plastic Surgery Foundation, explicó en una entrevista con Catherine Hadro, presentadora de «EWTN News Nightly», que los cirujanos plásticos, como miembros de un equipo multidisciplinario de atención a pacientes, priorizan la medicina basada en la evidencia. «Tenemos la responsabilidad de proporcionar una educación integral y mantener un proceso de consentimiento informado robusto y basado en pruebas», señaló Glasburg. «Actualmente, la investigación sobre las cirugías de pecho y genitales para adolescentes con disforia de género simplemente no es lo suficientemente clara como para apoyar recomendaciones definitivas por parte de nuestra sociedad», agregó.
Cuando se le preguntó si la asociación profesional había experimentado alguna presión política para llegar a una decisión particular, Glasburg respondió que «la cirugía plástica es una especialidad guiada por la evidencia, y no estamos influenciados por fuentes externas ni por la política». Añadió que «creemos que se necesita más investigación de alta calidad en esta área de atención médica en rápida evolución, y nuestra prioridad sigue siendo la seguridad del paciente y la toma de decisiones informadas».
Al menos siete miembros de la ASPS están siendo demandados por personas que han «detransicionado», según Leor Sapir, miembro del Instituto Manhattan y experto en medicina pediátrica de género. Uno de los casos más destacados es el de Kayla Lovdahl, de 18 años, quien demandó a un médico de la ASPS y a otros dos médicos el año pasado, acusándolos de presionarla para someterse a cirugías de cambio de sexo cuando era niña. Según su demanda, la Dra. Winnie Tong, miembro de la ASPS, junto con otros dos doctores, le realizó una doble mastectomía cuando tenía 13 años y le administró bloqueadores de la pubertad a los 12 años.
Lovdahl «detransicionó» poco después, a los 17 años, y comenzó un tratamiento de psicoterapia para tratar sus síntomas de salud mental. Cuando se le preguntó sobre la reciente declaración de la ASPS sobre la calidad de la evidencia citada, Glasburg explicó: «Creemos que el nivel de evidencia en estos estudios es de baja calidad. Eso significa que cada estudio tiene fortalezas y limitaciones que pueden decirnos algo interesante, pero es importante dar un paso atrás y analizar los efectos observados y evaluar el conjunto de evidencias acumuladas a lo largo del tiempo».
Glasburg expresó su preocupación sobre la incertidumbre en cuanto a la eficacia a largo plazo de las intervenciones quirúrgicas para el tratamiento de adolescentes con disforia de género. «Cuando decimos que hay incertidumbre respecto a la eficacia a largo plazo del uso de ciertas intervenciones quirúrgicas para tratar a adolescentes con disforia de género, queremos decir que hay incertidumbre en muchos niveles diferentes», continuó. «No tenemos claro realmente qué muestran los datos sobre los resultados ni cuáles podrían ser los efectos a largo plazo de estos tratamientos».
El presidente de la Plastic Surgery Foundation subrayó que la ASPS se mantiene comprometida con un enfoque basado en la evidencia y que seguirán de cerca la evolución de la investigación en el futuro, siempre ciniéndose a la seguridad del paciente y a la evidencia clínica disponible. «Para nosotros, todo se basa en la evidencia», afirmó. «De nuevo digo que estamos separados de la política. Estamos separados de fuerzas externas».
Glasburg concluyó diciendo que la ASPS se compromete a ser una organización científica de cirujanos que quieren hacer lo correcto para sus pacientes y proporcionar la educación necesaria a sus miembros para que tomen las decisiones correctas en beneficio de la seguridad del paciente.