(InfoCatólica) El Pontífice animó a las religiosas a encontrar nuevos lenguajes y caminos que refuercen la vida contemplativa, preservando el carisma tradicional mientras se adapta para ser comprendido y atractivo en la actualidad.
Subrayó que la vocación contemplativa no debe reducirse a una inercia espiritual, sino que debe ser un dinamismo de amor que vincule profundamente con Dios y enriquezca las actividades cotidianas, siguiendo el ejemplo de Santa Teresa de Jesús.
Francisco aseguró que «las estrategias defensivas son fruto de una vuelta nostálgica al pasado; eso no funciona, la nostalgia no funciona, la esperanza evangélica va por otro lado, nos da la alegría de la historia vivida hasta hoy, pero nos hace capaces de mirar al futuro, con esas raíces que hemos recibido». En ese sentido, cabe recordar la advertencia que Dios dio al profeta Jeremías sobre la importancia de arraigarse en la Tradición:
«Esto dice el Señor. «Haced un alto en los caminos y mirad, preguntad por las sendas antiguas cuál es el camino del bien, y seguidlo, y hallaréis descanso para vuestras almas. Pero dijeron. «No lo seguiremos». Yo os había puesto centinelas. «Prestad atención al toque de trompeta». Pero respondieron. «No la prestaremos».»
(Jer 6,16-17).
Finalmente, el Papa alentó a las carmelitas enfrentar desafíos con esperanza evangélica, mirando al futuro con innovación y manteniendo las raíces del pasado, instando a vivir en la libertad del abandono en Dios y con un amor recíproco entre las comunidades.
